Se trata de la primera medida en materia económica que toma Argel en plena crisis política con Madrid, por su giro en la política sobre el Sáhara Occidental, y después de suspender ayer miércoles el Tratado de Amistad.
La congelación de las operaciones bancarias relacionadas con comercio exterior de productos y servicios entre Argelia y España entró hoy en vigor con la incertidumbre de lo que supone su aplicación práctica.
Una fuente del sector financiero explicó a Efe que la circular transmitida ayer por la Asociación Profesional de Bancos y Establecimientos Financieros (ABEF), un organismo bancario clave en Argelia, implica a todas las transacciones comerciales con España.
“Todo lo que es producto acabado destinado a la reventa, materias primas para la producción local, etc. se verá afectado por esta decisión”, dijo la fuente, que matizó que la congelación se trata de una “suspensión” y no de “una interdicción”.
Si la decisión es publicada en el Boletín Oficial tendrá rango de ley, adelantó el implicado.
La empresa argelina de hidrocarburos Sonatrach declinó a Efe hacer comentarios sobre las posibles repercusiones en el sector gasístico, pero expertos creen que no afectará al suministro de gas por el obligado cumplimiento de los contratos vigentes entre los dos países.
Se trata de la primera medida en materia económica que toma Argel en plena crisis política con Madrid, por su giro en la política sobre el Sáhara Occidental, y después de suspender ayer miércoles el Tratado de Amistad que regía las relaciones entre los dos países desde hace dos décadas.
España fue en 2021 el tercer cliente de Argelia, por detrás de Italia y Francia, y el país magrebí, hasta este año el principal proveedor de gas a España, ha sido un socio prioritario en la región.
Entre enero y agosto de 2021 las exportaciones de España a Argelia fueron de 1.242 millones de euros, mientras que las importaciones ascendieron 2.556 millones de euros, según los últimos datos recogidos por la Oficina Económica y Comercial de España en el Exterior.