Temenos apuesta por la tendencia “Buy Now Pay Later” (Compra ahora, Paga después), para democratizar el crédito panameño. El nuevo producto es ideal para bancos y Fintechs, para generar nuevas oportunidades de ingresos.
Con la irrupción de las nuevas tecnologías, el mercado financiero es sin duda uno de los más impactados ante tantos cambios. La pandemia de COVID-19 también impulsó esta nueva forma de comportamiento enfocada en lo digital, que influye en la cadena de entidades financieras, clientes y proveedores.
Según el Global Findex del Banco Mundial, el 2.3% de la población panameña de 15 años o más utiliza cuentas bancarias para propósitos comerciales, frente a un 3.8% en América Latina y un 17.7% en los países de ingreso alto.
En este contexto Temenos, como empresa líder en software bancario con operaciones globales, invierte en tecnología para atender las más altas tendencias del sector financiero, entre ellas “Compre Ahora y Pague Después”, un viejo conocido de los latinoamericanos, pero que ahora alcanza nuevas modalidades y extensión, a través de productos como Temenos BNPL, “Buy Now Pay Later”.
De acuerdo con Enrique Ramos O’Reilly, director regional de Temenos Latam & Caribbean, la nueva solución brindará a bancos y Fintechs nuevas oportunidades de ingresos, permitiéndoles acceder a nuevos mercados y fortalecer sus relaciones con los clientes, a través de un programa de préstamos que promete democratizar y facilitar la vida de aquellos que necesitan dinero extra.
“Por un lado, está la oportunidad para bancos y Fintechs de generar un nuevo modelo de ingresos al ofrecer un producto para quienes tienen dificultades para acceder a otro tipo de créditos con mayores requisitos, y, por otro, la facilidad para el consumidor final”, explicó el ejecutivo.
El sistema Temenos BNPL es capaz de identificar perfiles y presentar una preaprobación de solicitudes de préstamo u ofrecer cuotas variables en tiempo real, según criterios predeterminados. “La tecnología que usamos proporciona visibilidad de la decisión crediticia con un programa de pago recomendado durante el proceso de solicitud para que el cliente pueda estar seguro de que puede cumplir con los pagos programados”, indicó Ramos O’Reilly.
Detalló que es una solución ideal para las generaciones más jóvenes, ya sean Millennials o Z, que necesitan ese soplo financiero inmediato, pero que muchas veces no cuentan con garantías a la hora de solicitar un préstamo, o no cuentan con una tarjeta de crédito con límite suficiente para pagar productos en plazos.
La tecnología Temenos BNPL funciona independientemente del sistema bancario central, se accede a ella a través de Temenos Banking Cloud. Por lo tanto, las instituciones y las empresas pueden implementar la tecnología junto con Temenos Transaction o cualquier otro sistema bancario importante. “El uso de las marcas de adecuación para este servicio también democratiza su uso, habilitando socios de todos los tamaños, que pueden ser atendidos por la misma tecnología”, precisó el director regional de Temenos Latam & Caribbean.
Los intermediarios que se asocian con las tiendas y que pueden adelantarse a sus competidores también ganan. “Existe la posibilidad de generar una nueva fuente de ingresos, captando nuevos clientes, sin el riesgo de cambiar de core bancario”, agregó.
Las fintechs que vieron esto como una posibilidad de ingresar al mercado, tomaron la iniciativa, ya sea para ofrecer préstamos que no eran accesibles o a través de alianzas con los canales adecuados para dar acceso a millones de usuarios.
“Como proveedor de tecnología estratégica para más de 3,000 bancos en todo el mundo, estamos comprometidos a capacitar a nuestros clientes para que sean los primeros en adoptar esta financiación alternativa, como un producto diferenciado que es capaz de ofrecer un rendimiento escalable para este nuevo momento digital que están viviendo”, concluyó Enrique Ramos O’Reilly.
Datos adicionales:
A pesar del reciente conflicto geopolítico, condiciones financieras más ajustadas y presiones inflacionarias significativas, la Superintendencia de Bancos de Panamá (SBP) aseguró que las entidades bancarias siguen registrando incrementos en la cartera de créditos nuevos, de acuerdo con las estadísticas del Informe de Actividad Bancaria (IAB).
Prueba de ello es que, a marzo de 2022, los préstamos nuevos tuvieron un incremento de 52.2%, al totalizar $5,072 millones, al compararlo con igual período del año anterior, cuando sumaron $3,332 millones, es decir, $1,739 millones adicionales. El informe mostró que la cartera de crédito local registró un saldo de $55,770 millones, lo que significa un incremento de $1,733 millones o 3.2%, con relación al año anterior.