En distintas variantes y desde numerosas administraciones gubernamentales se nos ha negado a los contribuyentes un servicio serio y eficiente, destacó el gremio empresarial.
La Cámara de Comercio, Industrias y Agricultura de Panamá (CCIAP), se refirió este domingo 19 de junio de 2022, en su tradicional artículo “La Cámara Opina”, a la crisis de la basura, en el que aseguró que no es un problema de camiones, es fracaso del modelo.
La “crisis de la basura” es otro triste ejemplo de las consecuencias que pagamos los ciudadanos cuando se aplican soluciones políticas a problemas eminentemente técnicos.
Ciudades en todo el mundo, con poblaciones y volúmenes de desechos cientos de veces más grandes que los nuestros, resolvieron hace años el manejo de sus desechos a base de una administración profesional por parte de entidades o empresas especializadas en la materia.
Y hablamos no solo de la tarea básica de recolectar desechos, sino de transformarlos en programas de reciclaje e incluso mediante la generación de energía para las ciudades.
¿Y en Panamá? En distintas variantes y desde numerosas administraciones gubernamentales se nos ha negado a los contribuyentes un servicio serio y eficiente por el hecho de imponer la politiquería, la falta de transparencia y modelos operativos del pasado que nos llevan de “crisis en crisis”.
El alto precio de este fracaso lo pagamos todos: los ciudadanos que estamos viviendo en ambientes enfermos e insalubres; la empresa privada, que ve cómo cualquier esfuerzo de reactivar los negocios choca con la inoperancia de un componente tan crítico; el Estado, al que se le crean nuevas crisis como las de salud y el impacto negativo en sus propias promociones turísticas; los trabajadores que jamás llegan a especializarse, y que cada tanto tienen que irse a huelga para mejorar sus condiciones porque ese es el método que propicia la forma actual de administrar la recolección de desechos.
No tardará en emerger la solución preferida de la administración politizada: comprar más camiones, aumentar presupuestos, es decir, que gastemos más recursos en el modelo que lo único que nos ha dado es ineficiencia.
Ojalá que en lugar de eso esta vez sea distinto. Ojalá que comencemos en serio a profesionalizar de una vez por todas el manejo de nuestros desechos para que los panameños recibamos el servicio que nos merecemos.
En la misma ciudad que no es capaz de recolectar y disponer adecuadamente su basura se manejan todos los días el cruce de decenas de buques; cientos de vuelos en el principal hub aéreo de América Latina; o miles de pasajeros en el único sistema de metro de la región. Queda claro que tenemos el talento humano para analizar y resolver el problema, de ahí que hacemos un llamado a la implementación de modelos tanto públicos como privados de administraciones transparentes, profesionales y especializadas, sin la perniciosa politiquería.