El Ministerio de Salud refuerza las estrategias para fortalecer las habilidades de médicos y enfermeras en la prevención y reducción de muertes maternas.
Según el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos, entre los años 2014 y 2017, las muertes maternas se redujeron en un 40%; pues en el 2014 se registraron 58 muertes maternas por cada 100 mil nacimientos vivos y en el 2017 fueron 33 por cada 100 mil nacimientos vivos.
La progresiva reducción de las muertes maternas lograda hasta el año 2019, se trastocó en el 2020, cuando se registraron 76 por cada cien mil nacimientos vivos, es decir un aumento del 86%, respecto al año anterior; situación atribuida en gran medida a la pandemia por Covid-19.
De las 55 muertes maternas registradas en el año 2020, se determinó que 37 fueron por causas directas y 18 por causas indirectas; y que el 50% de estas muertes indirectas guardaban relación con el covid 19 y el 11% con la tuberculosis pulmonar.
Sin embargo, la mayoría de las muertes maternas, tanto por causas directas, como indirectas, pudieron haberse evitado con adecuados controles sanitarios y mejores condiciones socioeconómicas, de acuerdo con información proporcionada por el Ministerio de Salud (MINSA).
Para reducir muertes y complicaciones durante y después del embarazo, con el apoyo de instituciones internacionales, el MINSA progresivamente intensifica la promoción de controles prenatales, mejorar las salas de obstetricia y pediatría de hospitales y centros de salud; y la capacitación de su personal técnico, sobre la atención de los problemas en este periodo.
También se construyó en las comarcas indígenas albergues que brindan alojamiento, alimentación, promoción básica en salud, durante un tiempo determinado de la gestación, parto y post parto, principalmente para mujeres con embarazos de alto riesgo, que viven en extrema pobreza y para las que viven en áreas de difícil acceso.
La institución dio a conocer que .a través de la Coordinación de Salud Sexual y Reproductiva del Ministerio de Salud, región de Chiriquí, se desarrolló un taller teórico practico para fortalecer las habilidades de médicos y enfermeras en la prevención y reducción de muertes maternas.
La estrategia denominada “Código Rojo” enfatiza la prevención de la hemorragia obstétrica (durante o después del parto), principal causa de muertes maternas directas en Panamá informó la directora médico regional, Gladys Novoa.
El diagnóstico temprano que se logre a través de una oportuna detección de determinados síntomas es vital para la prevención de hemorragias y otros problemas que pueden ocurrir antes, durante y después del parto, indicó Novoa, también especialista de trayectoria en el campo de la ginecología.