Los precios del petróleo subieron con fuerza el martes gracias en buena medida al levantamiento de las restricciones sanitarias en China, mientras aumenta la tensión del lado de la oferta.
El barril de Brent del mar del Norte para entrega en agosto ganó 2,51% a 117,98 dólares, su nivel más alto en dos semanas.
De su lado, el West Texas Intermediate (WTI) para agosto, ganó 1,99% a 111,76 dólares.
“Hoy la atención estuvo centrada en los últimos acontecimientos en China”, que redujo el martes la cuarentena obligatoria para viajeros que ingresan al país, explicó John Kilduff, de Again Capital, lo cual debería contribuir a impulsar la economía china.
El analista también señaló que las autoridades chinas aumentaron en casi 50% las cuotas de importación permitidas a los refinadores del sector privado, “lo cual ayuda al crudo” a subir.
Kilduff indicó que esta decisión podría, a futuro, aliviar los precios de los productos refinados, en particular del gasoil.
Pero el aumento de demanda en China se produciría en cualquier caso en un contexto de oferta insuficiente, que se agravó en los últimos días, con cierres de campos petroleros en Libia en medio de una crisis política, y una reducción de producción en Ecuador en medio de protestas indígenas.
En las últimas horas, varios dirigentes dieron a entender que Arabia Saudita y Emiratos Árabes Unidos están actualmente cerca de sus máximos de producción.
Hasta ahora eran considerados como los únicos miembros de la OPEP que podían aumentar volúmenes sensiblemente.
En este contexto, “se necesitará tal vez una recesión para hacer bajar los precios del petróleo a niveles sostenibles”, estimó Craig Erlam, de Oanda.