Microserfin es, junto a las otras cuatro que forman el Grupo FMBBVA, la primera del sector privado en el país y en el mundo, que usa este índice para analizar la situación de los más de 18,000 microempresarios que atiende en Panamá.
Las carencias más comunes que enfrentan los microempresarios en situación de vulnerabilidad son: el seguro de salud (afecta al 56% de los hogares), los años de escolarización (34%), el saneamiento (29%) y por último el acceso a Internet (20%), así lo reveló el informe del Índice de Pobreza Multidimensional (IPM), diseñado por la Fundación Microfinanzas BBVA, Microserfin y basado en el de SOPHIA Oxford, a partir de datos de los microempresarios que atienden en el país, con el fin de conocer sus condiciones de vida.
Dicho informe, que es el resultado de más de 9,000 encuestas a microempresarios en cinco países de América Latina, entre ellos Panamá, está basado en nueve indicadores que apuntan a tres dimensiones de la pobreza: educación, salud y vivienda, para medir cuántos hogares tienen estas carencias y con qué intensidad.
De esta manera, los indicadores evidenciaron que entre el 24,3% y el 33,7% de los microempresarios panameños atendidos por Microserfin, vive en un hogar en situación de pobreza multidimensional.
“Queremos profundizar en el conocimiento del bienestar de las familias de los microempresarios a los que atendemos, para mejorar su calidad de vida; por eso hemos utilizado este método de medición de pobreza multidimensional, que complementa los que ya veníamos realizando”, señaló Stephanie García Van Gool, directora de Medición de Impacto y Desarrollo Estratégico de la FMBBVA.
Según el informe, el seguro de salud es la principal carencia que enfrentan los microempresarios vulnerables en sus hogares. Más de la mitad de las personas atendidas por Microserfin y que son parte de la muestra, vive en un hogar donde, al menos, una persona carece de seguro de salud y casi la mitad de los individuos sin seguro de salud son niños y jóvenes adultos, entre los 18 a 29 años.
En cuanto a los años de escolarización, se observó que uno de cada cinco adultos entre los 18 y los 64 años no completó el número mínimo de años de escolarización exigido para su grupo de edad. De ellos, más de la mitad con esta carencia tiene 35 años o más. Y los individuos en este grupo de edad tienen, en promedio, 2,1 años de escolaridad, lo que corresponde a menos de la mitad de los 6 años mínimos exigidos para este grupo de edad.
Por otra parte, la tercera carencia que aqueja el bienestar de los microempresarios encuestados es el saneamiento, cerca del 30% vive en un hogar sin saneamiento adecuado. El 16% todavía utiliza letrinas sin pozo séptico.
Y en la cuarta carencia ocupada por el Acceso a Internet, el informe determinó que uno de cada cinco microempresarios de la muestra no tiene acceso a Internet porque no lo considera necesario. El 9% de ellos no lo tiene por su elevado precio.
Los resultados del Índice Interno de Pobreza Multidimensional de Microserfin mostraron además que, a mayor tamaño de hogar, mayor pobreza multidimensional, tanto en intensidad como en incidencia. Este es 2,5 veces más alto en aquellos hogares con cinco o más miembros que entre los hogares que tienen dos miembros como máximo (0,229 frente a. 0,084). Y arrojó que los hogares en situación de pobreza multidimensional tienen una mayor probabilidad de contar con más personas, de tener hijos y de percibir menores ingresos del hogar per cápita que los hogares no pobres.
Retos y oportunidades
Edison Mejía, gerente general de Microserfin, manifestó que, “conocer el hogar de los microempresarios en sus múltiples dimensiones es el primer paso para fortalecer nuestra oferta de valor de la entidad con productos y servicios que respondan a las necesidades que encontramos en el IIPM”.
A la fecha, la entidad ha estado trabajando en atender algunas de las principales carencias encontradas en el informe, como el acceso a seguros con sus programas de asistencias de salud y microseguros, que ya han beneficiado a 11 mil personas tanto en entornos rurales como urbanos. También en materia de educación ha impulsado su programa de educación financiera que en 2021 impactó a 15.437 personas. Y, asimismo promueve el uso de la tecnología y la digitalización de los microempresarios, a través de su plataforma gratuita Impulsamos tu negocio.
Por eso, para Mejía: “Utilizar la reciente información recabada del IIPM, a fin de seguir brindando soluciones es esencial en este contexto en el que hemos visto que, durante los últimos 3 años, los microempresarios han mantenido un perfil económico y social vulnerable. De hecho, en 2021 que nuestra entidad atendió a 17,695 personas, encontramos que entre los nuevos microempresarios atendidos se observa una mayor vulnerabilidad económica como consecuencia de la pandemia, estando un 87% en situación de vulnerabilidad (frente a un 85% en 2020)”.
El impacto de la pandemia fue significativo tanto en las microempresas como en los hogares de los microempresarios, lo cual confirmó su fragilidad financiera.
En palabras del director de la Fundación Microfinanzas BBVA, Javier M. Flores, ahora más que nunca, la FMBBVA y su entidad panameña, Microserfin, seguirán al lado de los microempresarios.
Además, destacó que lo más importante de los 15 años de actividad, “es haber ayudado a millones de personas a tener una mejor calidad de vida. Ese es nuestro principal objetivo”.