Las autoridades japonesas ordenaron este martes el sacrificio de unos 40.000 pollos en una granja del oeste del archipiélago, tras detectar en la víspera numerosas aves muertas cuyos análisis dieron positivo en gripe aviar.
Las aves pertenecían a una granja avícola situada en la ciudad de Kanonji, en la prefectura de Kagawa (isla de Shikoku), en torno a la que se ha establecido un área de exclusión de tres kilómetros a la redonda, según detalles publicados hoy por la cadena pública NHK.
El día 31, en torno a una treintena de aves de corral fueron halladas muertas y se procedió al análisis de 13 de ellas, de las que 11 dieron positivo en la cepa H5 del virus de la gripe aviar, altamente contagiosa, por lo que las autoridades decretaron el sacrificio de decenas de miles de aves de las instalaciones.
Además de limitar el movimiento en torno a la granja afectada, las autoridades de Kagawa han restringido las exportaciones en un radio de 10 kilómetros para evitar que el virus se propague.
La prefectura de Kagawa fue escenario hace dos años de una serie de brotes de gripe aviar altamente contagiosa que llevó al sacrificio de cerca de 1,8 millones de aves.
Este es el tercer brote de la enfermedad animal detectado en Japón esta temporada, tras otros de los que se tiene constancia en la prefectura de Okayama, en la isla de Honshu, la mayor del archipiélago y situada al norte de Kagawa; y en Hokkaido, la isla más septentrional de Japón.