La audiencia final del proceso fue anunciada este miércoles por la Sala Penal Especial de la Corte Suprema, tras el juicio oral al que sometió a Fujimori y otros dos exlegisladores.
La Corte Suprema de Perú decidirá el próximo martes si acepta el pedido de la Fiscalía de condenar al excongresista Kenji Fujimori, hijo menor del expresidente Alberto Fujimori (1990-2000), a 12 años de cárcel por la presunta comisión de los delitos de tráfico de influencias y cohecho en agravio del Estado.
La audiencia final del proceso fue anunciada este miércoles por la Sala Penal Especial de la Corte Suprema, tras el juicio oral al que sometió a Fujimori y otros dos exlegisladores por la acusación de haber intentado comprar votos para evitar que se destituyera, en 2017, al entonces mandatario Pedro Pablo Kuczynski.
Fujimori fue grabado por el fallecido legislador Moisés Mamani haciendo supuestos ofrecimientos de obras públicas a otros parlamentarios y fue denunciado públicamente por Fuerza Popular, el partido presidido por su hermana Keiko, que promovía la destitución, finalmente fallida, de Kuczynski.
El Poder Judicial indicó que la fecha de lectura de sentencia fue anunciada por la magistrada Inés Villa Bonilla, tras escuchar los alegatos finales del también exparlamentario Guillermo Bocangel.
La semana pasada, al presentar también su alegato final, Fujimori aseguró que está “totalmente decepcionado” y “desilusionado” de la política y rechazó cualquier posibilidad de volver a integrar el partido de su hermana.
“Desde esa fecha no pertenezco a Fuerza Popular ni voy a regresar a esa agrupación política, que, con malas artes, me ha traído hasta aquí”, remarcó antes de agregar que “es tanto el daño y el dolor” que le ha causado el paso por la política, que se siente “totalmente decepcionado, desilusionado” y no quiere “saber nada de política”.
El exparlamentario añadió que “nunca hubo un ofrecimiento de obras a cambio de votos en contra” de la destitución de Kuczynski y que tampoco “hubo negociación del indulto” que otorgó ese mandatario a su padre el 24 de diciembre de 2017.
Ese indulto fue anulado meses después por el Poder Judicial por irregularidades, por lo que el expresidente Alberto Fujimori retornó a prisión para seguir cumpliendo la condena a 25 años de cárcel que se dictó en su contra en 2009 por crímenes de lesa humanidad.
Kenji Fujimori también afirmó que por “pensar diferente” fue sancionado por el partido dirigido por su hermana, con la intención de amedrentarlo y convertirlo en un “eunuco político”, y que apoyó al Gobierno de Kuczynski durante la atención por el fenómeno climático de El Niño “sin pedir nada a cambio”.
Junto a él fueron procesados los exlegisladores Bienvenido Ramírez y Guillermo Bocángel, así como el exasesor Alexei Toledo, con quienes formó, tras ser expulsados del partido fujimorista, otro grupo parlamentario que fue conocido popularmente como los “Avengers”.
En enero pasado, al inicio del juicio oral, la Fiscalía sustentó su pedido de 12 años de prisión para Fujimori, además del pago de una multa de 130.000 soles (unos 33.300 dólares) y la inhabilitación por 183 meses para el ejercicio de cualquier cargo público.