La subsecretaria Mónica Medina destacó que EE.UU. tiene leyes “muy estrictas” contra este flagelo, y que su participación en la CoP19CITES apunta a “cómo se puede detener el tráfico ilegal de vida silvestre”.
La subsecretaria de Estado para los Océanos y Asuntos Ambientales y Científicos Internacionales de Estados Unidos, Mónica Medina, destacó ayer martes que su país está comprometido de manera decidida en la lucha contra el tráfico ilegal de vida silvestre, una lacra que impacta a la “seguridad global”.
“Estados Unidos tiene muchos recursos trabajando para combatir el tráfico ilegal de vida silvestre”, dijo Medina en un encuentro con la prensa extranjera durante su participación en la IV Reunión Mundial de las Redes de Cumplimiento de la Vida Silvestre (WEN, por sus siglas inglés).
Esta reunión de las WEN se desarrolló en el marco de la Conferencia Mundial sobre Vida Silvestre (CoP19CITES), que comenzó el pasado día 14 y culminará el 25 de noviembre y examina 52 propuestas para reforzar la protección de unas 200 especies arbóreas, tiburones, lagartos, ranas, aves, elefantes, rinocerontes e hipopótamos.
La alta funcionaria estadounidense indicó que en este esfuerzo por combatir el contrabando de especies están involucrados, entre otros, el Departamento de Estado, la Policía, la guardia costera, las patrullas fronterizas y el Servicio Federal de Pesca y Vida Silvestre (FWS, por su sigla en inglés).
“Tenemos todo un enfoque sobre esto desde el Gobierno para acabar con este comercio ilegal de especies en peligro de extinción, nos enfocamos en ello pues es importante para la biodiversidad”, indicó.
Alertó, no obstante, que una crisis en la vida silvestre y de la biodiversidad a causa del tráfico de especies por grandes redes de delincuentes, impacta por igual en la “seguridad global”.
Medina resaltó, además, que el contrabando ilegal de vida silvestre es el tercero más grande, después del de las armas y el de la droga, y señaló que son “miles de millones de dólares” que genera, una gran cantidad de ellos con la pesca ilícita, apuntó.
La subsecretaria destacó que EE.UU. tiene leyes “muy estrictas” contra este flagelo, y que su participación en la CoP19CITES apunta a “cómo se puede detener el tráfico ilegal de vida silvestre”.
“Estas actividades criminales amenazan la seguridad nacional, socavan el estado de derecho, roban a los países y comunidades su base de recursos naturales e ingresos, llevan a las especies al borde de la extinción y propagan enfermedades. Deben ser detenidos y el momento de actuar es ahora. Solo trabajando juntos podemos poner fin a estos crímenes insidiosos”, afirmó Medina.
En su encuentro con la prensa extranjera, Medina dijo que para procesar a los traficantes de vida silvestre hay que seguir los procedimientos legales en sus países, reunir evidencias y utilizar el sistema judicial de forma adecuada, “para poder tener la confianza de que estos casos serán juzgados y que los delincuentes serán llevados a cumplir la ley”.
En su visita de dos días a Panamá, que concluyó ayer martes, Medina, además de asistir a la CoP19CITES, participó en un encuentro de coordinación en camino hacia la tercera reunión de la Comisión de Cooperación Ambiental bajo el Acuerdo de Cooperación Ambiental (ACA) entre Panamá y los Estados Unidos, en el contexto del Tratado de Promoción Comercial (TPC) entre los dos países.
Este encuentro bilateral fue presidido por Medina y el ministro panameño de Ambiente, Milciades Concepción.
En esta reunión se revisaron aspectos del Corredor Marino del Pacífico Este Tropical (CMAR), la celebración de la conferencia de Our Oceans en 2023, seguridad acuática, la protección de los mares y de los paisajes marinos, y la pesca ilegal.
La seguridad de los océanos fue considerado el tema de “mayor urgencia” por Medina, y alentó a Panamá a crear una Secretaría Técnica para CMAR con la finalidad de lograr una mayor eficiencia y fortalecer la cooperación internacional, señaló un comunicado de MiAmbiente.