La Casa Blanca lanzó este miércoles una serie de directrices para promover alquileres de vivienda accesibles en Estados Unidos y aumentar la equidad.
El plan incluye la creación de un sistema para que la Comisión Federal de Comercio (FTC) y la Oficina de Protección Financiera del Consumidor (CFPB), ambas agencias independientes, sumen información para identificar prácticas injustas.
Las dos agencias buscarán información sobre una amplia gama de prácticas que afectan el mercado de alquiler como son la verificación de antecedentes o el uso de algoritmos en las evaluaciones de inquilinos.
La acciones anunciadas en su web por la Casa Blanca incluyen un “Plan para una Declaración de derechos de los inquilinos”, que no es vinculante pero que establece pautas claras para ayudar a los arrendatarios a permanecer en viviendas asequibles.
Según los últimos datos oficiales de la inflación, el precio de los alquileres ha subido el 7,5 % en un año, a diferencia de otros conceptos que se toman en cuenta a la hora de calcular la inflación que han continuado bajando.
La Casa Blanca también lanzó un llamamiento, el “Desafío de vivienda centrado en el residente”, que tiene como objetivo lograr que los proveedores de vivienda, así como los Gobiernos estatales y locales, fortalezcan las políticas en sus propios mercados.
Este plan establece un conjunto de principios para impulsar la acción del gobierno federal, los socios estatales y locales y el sector privado para fortalecer la protección de los inquilinos y fomentar la asequibilidad del alquiler.