La organización criminal pidió a cambio contar con protección y tener el derecho a participar en el nombramiento del procurador
El Cártel de Sinaloa aportó entre $2 y $4 millones a la campaña presidencial de Andrés Manuel López Obrador (AMLO) en 2006, según lo reveló la periodista especializada en temas de narcotráfico Anabel Hernández.
Según publica el diario NA Noticias Argentinas, la información que hasta el momento se mantenía en secreto fue realizada por la Fiscalía Federal del Distrito Sur de Nueva York y la agencia antidrogas DEA, entre 2010 y 2011.
La fiscalía habría obtenido reportes confidenciales y obtuvo grabaciones de audio en la que miembros de la organización delictiva y personas cercanas a AMLO confirmaron su participación en la entrega y recepción del financiamiento ilícito.
Jocelyn Strauber, quien se desempeñó como fiscal de 2005 a 2013, fue la encargada de la investigación. Entre los capos señalados por la periodista aparecen Arturo Beltrán Leyva, alias El Barbas y Edgar Valdez Villarreal, La Barbie.
Estas personas eran parte de la cúpula de la llamada Federación, asociada con los narcotraficantes Joaquín Guzmán Loera, alias El Chapo, e Ismael Zambada García, alias El Mayo, entre otros.
Según expone, la organización criminal pidió a cambio contar con protección y tener el derecho a participar en el nombramiento del procurador General de la República si López Obrador ganaba la elección.
Sostiene que todo comenzó a finales de 2005 durante una reunión celebrada en un hotel en Nuevo Vallarta, Nayarit. En esta reunión, estuvieron presentes La Barbie, como representante de Arturo Beltrán Leyva; su suegro Carlos Montemayor González, quien también era integrante del Cártel de Sinaloa; Dipp Jones, y León García.
Ahí se acordó que la organización criminal iba a dar al menos dos millones de dólares a la campaña de AMLO. Se decidió que López Nájera fuera el contacto para hacer llegar el dinero del Cártel de Sinaloa.
La segunda reunión se llevó a cabo en Ciudad de México en una casa ubicada en Aristóteles 131, de la colonia Polanco. Estuvieron presentes López Nájera, Soto Caballero, Dipp Jones y León García.
Durante los dos años de investigación, la Fiscalía y la DEA descubrieron y corroboraron quiénes fueron los protagonistas de esa trama.