Mayor caída está en la construcción y el consumo, tras las medidas radicales del régimen de Milei
Los 13 insumos de la construcción que mide el índice de precios en Argentina tuvieron caídas de hasta el 21% en enero. El promedio de todos da un desplome generalizado que carece de precedentes en al menos los últimos 12 meses y que, encabezado por el asfalto, casi duplica el de diciembre, informó el diario argentino La Nación.
A la industria manufacturera también le fue mal, bajaron 14 de los 16 sectores, lo que representa una disminución anual de 12,4% en enero, la octava caída consecutiva en siete meses.
Es la magnitud de la recesión en que ha entrado la Argentina, algo que a los industriales les preocupa incluso más que el comportamiento de los precios, y que en gran parte de los casos se explica en el ajuste del régimen de Javier Milei.
En la construcción influye principalmente la paralización de la obra pública que dispuso Milei.
La crisis ocupa gran parte de las conversaciones del mundo de la producción, dijo La Nación.
Hace una semana, en la reunión semanal de la Unión Industrial Argentina, casi no se habló de otra cosa que de la parálisis en las plantas. Las proyecciones tampoco mejoran para febrero, sino todo lo contrario: el índice de expectativas industriales registró en febrero un 38,2%, bastante por debajo del 42,8% que había registrado en enero.
Dante Sica, economista de la consultora Abeceb, que trabaja hace años con el sector industrial, anticipa para la Argentina un primer semestre complicado y una recuperación solo para los sectores más dinámicos y de mayor inversión como energía, minería, agro. “Esperamos una recesión corta y profunda”, añadió, porque a los de electrónica, línea blanca, prendas de vestir o calzado les va llevar más tiempo porque el consumo y los salarios van a seguir cayendo.