Asegura no tener capacidad de generar el flujo migratorio de las proporciones del que se vive en Darién
El Clan del Golfo, el mayor cartel narcocriminal de Colombia, aceptó la propuesta del presidente Gustavo Petro para iniciar “una negociación política” que lleve a un acuerdo de paz, informó la agencia Europa Press.
“Aceptamos la invitación hecha por el señor presidente, en el sentido de sentarnos a negociar las condiciones políticas que permitan las transformaciones sociales que todos queremos para las regiones en donde hacemos presencia”, comunicó el cartel.
Petro instó recientemente a la nueva fiscal general, Luz Adriana Camargo, a buscar caminos para un “acogimiento de la justicia” por parte del grupo armado, apuntando directamente al fin del tráfico de drogas y de personas.
“El que tiene el balón en la cancha es el Clan. ¿Se atreve o no se atreve? Si no se atreve guerreamos, porque la decisión es destruir el Clan. Si se atreven, abrimos las mesas de negociación”, dijo Petro.
El Clan del Golfo comentó que las actividades ilegales de narcotráfico existen en la región mucho antes de que se establecieran, principalmente, en la costa del Atlántico, el Pacífico, el Urabá y el Catatumbo.
Aseguraron que carecen de poder para “crear las condiciones para que se registre un flujo migratorio de las proporciones del que se vive en los últimos años en el Darién”.
Además, el cartel narcocriminal dijo estar dispuesto a acudir donde les indique el gobierno para entablar conversaciones a través de personas que se designen para tal fin. Reconocen que se trata de un camino difícil y complejo, pero están dispuestos a recorrer.
El Clan del Golfo fue uno de los grupos armados con los que Petro abrió la puerta a una negociación. Después de anunciar un alto el fuego bilateral en diciembre del 2022. En marzo del año siguiente, ordenó su suspensión luego de ser responsables de varios ataques.
De concretarse el inicio de una negociación de paz se sumaría a las que el gobierno tiene con la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional (ELN) y con el Estado Mayor Central (EMC), la principal disidencia de las antiguas FARC.