Rusia ha sido blanco de numerosos ataques cometidos por grupos islamistas y de tiroteos sin motivos políticos
El terror ha sacudido el corazón de Rusia. Al menos 60 personas murieron y más de 100 resultaron heridas en la noche del viernes en un tiroteo seguido de un incendio en una sala de conciertos a las afueras de Moscú, un atentado terrorista cuya autoría ha reivindicado Estado Islámico a través del canal de Telegram de la agencia Amaq, informó el diario español La Razón.
“El balance provisorio del atentado terrorista perpetrado en el complejo Crocus City Hall es actualmente de 40 muertos y de más de 100 heridos”, indicaron las fuerzas de seguridad, citadas por las agencias informativas rusas.
La cancillería atribuyó a “un sangriento atentado terrorista” la tragedia, que se produjo en un auditorio de Krasnogorsk, un suburbio en el límite noroeste de la capital rusa.
Ucrania aseguró que no tiene “nada que ver” con el ataque.
Según un reportero de la agencia RIA Novosti, personas con uniformes de camuflaje irrumpieron en la sala de conciertos y abrieron fuego antes de lanzar una granada o una bomba incendiaria, provocando un incendio. Las personas que estaban en la sala se echaron al suelo para protegerse de los disparos durante 15 o 20 minutos y muchos lograron salir a rastras, señaló.
Los servicios de rescate, citados por la agencia Interfax, dieron parte de un grupo de dos a cinco personas no identificadas, con uniformes de combate y armas automáticas, que abrieron fuego contra los agentes de seguridad en la entrada de la sala de conciertos y antes de empezar a disparar contra el público. Según el Ministerio ruso de Situaciones de Emergencia, los bomberos lograron evacuar a un centenar de personas que se encontraban en el sótano del lugar.
Las cadenas de actualidad Baza y Mash, cercanas a las fuerzas de seguridad en Telegram, publicaron videos en los que se ven al menos dos hombres armados que avanzan en el vestíbulo del complejo. En otras secuencias, se ven a cadáveres y grupos de personas que se precipitan hacia la salida. Otras imágenes muestran a espectadores escondiéndose detrás de las butacas o evacuando la sala.
En los últimos días, Rusia ha sido blanco de ataques de combatientes rusos antigubernamentales y de bombardeos procedentes de Ucrania, confrontada desde el 2022 a una intervención militar rusa. Rusia ya ha sido blanco de numerosos ataques cometidos por grupos islamistas y de tiroteos sin motivos políticos o atribuidos a personas desequilibradas.
En el 2002, un grupo de combatientes chechenos tomó a 912 personas como rehenes en el teatro moscovita de Dubrovka para pedir el repliegue de las tropas rusas de Chechenia. La angustiosa toma de rehenes se saldó con una intervención de las fuerzas especiales y la muerte de 130 personas, casi todas asfixiadas por el gas usado por los militares.