Está forzado a demostrar que tiene la energía y la habilidad de mantener cuatro meses de campaña frente a Trump
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, enfrenta 72 horas cruciales para el futuro de su candidatura a la reelección, intensamente cuestionada tras la desastrosa actuación en el debate con Dnald Trump que desató el pánico ante el estado y las capacidades del mandatario, de 81 años.
Enrocado en su deerminación a seguir, Biden está forzado a demostrar que tiene la energía y la habilidad de mantener los cuatro meses que quedan de campaña frente a Trump y cuatro años más de presidencia, algo que cuestionan votantes, políticos demócratas, estrategas, donantes y medios.
Se encuentra ante el momento más crítico de su larga carrera política. Y la máxima expectación la despierta una entrevista que graba con ABC News este viernes con George Stephanopoulos, un veterano reportero y antiguo operativo demócrata, que trabajó en la campaña de Bill Clinton y llegó a ser jefe de comunicaciones en su Casa Blanca.
La entrevista, que inicialmente la cadena iba a reservarse para el domingo, se emite finalmente en un especial este viernes en horario de máxima audiencia.
Será la primera oportunidad desde el debate en que se verá a Biden sin la ventaja de un guion o de los telepromters y sometido a las preguntas de un periodista que promete ser algo más inquisitivo que los dos locutores de estaciones de radio destinadas a audiencias negras que le han entrevistado esta semana.
ABC ha prometido emitir entera y sin ediciones la entrevista. Y es una prueba de fuego para Biden.
La entrevista se graba en Wisconsin, donde el presidente ha organizado después del debate un mitin electoral para este viernes.
Antes de hacer de anfitrión la semana que viene en la cumbre de la OTAN que se celebra en Washington, en la que está previsto que ofrezca una rueda de prensa en solitario, Biden realizará también el domingo una visita a Pensilvania.
Ese es otro de esos estados péndulo donde unos miles de votos acaban decidiendo las elecciones.
La primera brecha, no obstante, ha llegado este viernes. Aunque sin llamarle a retirarse directamente, la gobernadora de Massachusetts, Maura Healey, se ha convertido en la primera responsable demócrata de un ejecutivo estatal que le ha instado a “escuchar atentamente al pueblo estadounidense y evaluar cuidadosamente si sigue siendo nuestra mejor esperanza para ganar a Trump”.
Relajar su agenda no es, en cualquier caso, lo que ha planificado su campaña, consciente del momento crítico.
Este viernes se ha anunciado no solo el lanzamiento de una campaña publicitaria de $50 millones sino que durante todo el mes de julio se va a intensificar la actividad del presidente, que según ese anuncio planea hacer más entrevistas y también participar en más momentos “improvisados” de encuentros con los ciudadanos.