Lo acusan de fabricación y distribución de drogas y de importarlas ilegalmente a Estados Unidos
El exvicealcalde hondureño Mario José Cálix, alías ‘Cubeta’, fue extraditado este miércoles a Estados Unidos, que lo acusa de tráfico de drogas y uso de armas, una semana después de que la presidenta de Honduras, Xiomara Castro, diera “por terminado” el tratado de extradición, informó la agencia EFE.
Cálix fue entregado a integrantes de la Agencia Antidrogas de Estados Unidos (DEA) en la Base Aérea Enrique Soto Cano, situada en el centro del país, donde EE.UU. mantiene un reducido número de efectivos militares, por autoridades de Honduras.
El portavoz de la Secretaría de Seguridad de Honduras, Edgardo Barahona, informó a los periodistas que el acusado fue entregado a los agentes de la DEA bajo un fuerte dispositivo de seguridad.
Señaló que Cálix, quien ocupó el cargo de vicealcalde de Gracias, departamento occidental de Lempira, entre el 2014 y el 2018 por el opositor Partido Nacional, permanecía recluido en una celda de las Fuerzas Especiales Cobras, de la Policía Nacional en
Tegucigalpa, desde que fue capturado el 21 de junio en el municipio de Catacamas, departamento de Olancho, este de Honduras.
El 16 de agosto un juez natural designado por la Corte Suprema de Justicia (CSJ) autorizó la extradición de Cálix, la cual fue ratificada una semana después por el Tribunal Supremo.
Estados Unidos acusa a Cálix de “conspiración para importar una sustancia controlada hacia esa nación desde un lugar fuera de la misma” y de “fabricar y distribuir esa sustancia controlada con la intención y el conocimiento de que sería importada ilegalmente al Estado requirente”.
También se le señala por “uso y portación de armas de fuego”, así como por “conspiración para el uso y portación de armas de fuego”, ambos delitos relacionados con la supuesta importación de una sustancia controlada.
Además se le vincula como presunto socio del exdiputado Juan Antonio Hernández, hermano del expresidente hondureño Juan Orlando Hernández y condenado en marzo del 2021 a cadena perpetua por narcotráfico.
El expresidente Hernández fue condenado también en junio a 45 años de cárcel y cinco más de libertad vigilada por varios delitos relacionados con el narcotráfico y el uso de armas.