La situación ha provocado que el gobierno decretara un estado de emergencia en todo el país
Al menos 11 personas han muerto en el país por temporales que en los últimos 12 días han provocado más de $100 millones en pérdidas por inundaciones y el colapso de infraestructuras, informó el gobierno nacional.
“11 panameños han perdido la vida en esta situación, más de 1.000 familias han sido afectadas directamente y el número sigue creciendo”, dijo el ministro de la Presidencia, Juan Carlos Orillac.
La situación ha provocado que el gobierno decretara un estado de emergencia en todo el país “como consecuencia de los graves daños ocasionados” por las lluvias, añadió Orillac.
Las zonas más afectadas son las provincias occidentales de Chiriquí, Veraguas y la comarca indígena Ngäbe Buglé, donde el gobierno ha decretado alerta roja.
El presidente panameño, José Raúl Mulino, aseguró que se calcularon las pérdidas en $100 millones, pero esa suma puede aumentar por los daños producidos en importantes infraestructuras del país.
El año pasado, Panamá experimentó una sequía que llevó a reducir los tránsitos en el Canal, pero la situación se fue normalizando este año con la temporada de lluvias, que han sido abundantes desde mayo.
Las fuertes lluvias han provocado el desbordamiento de ríos, el daño de más de 600 viviendas, deslizamientos de tierras, el colapso de algunas carreteras, la pérdida de cultivos, especialmente arroz, y la afectación de plantas potabilizadoras.
“En función de los informes que he recibido los daños son grandes”, afirmó Mulino.
El aeropuerto de David ha permanecido cerrado en forma temporal. Según Mulino, la carretera Interamericana también sufrió un duro golpe.
“En 12 días hemos superado en lluvias lo que normalmente ocurre en un mes de noviembre”, declaró la directora del Instituto de Meteorología e Hidrología, Luz Graciela de Calzadilla.
El Sistema Nacional de Protección Civil alertó que habrá un aumento significativo de lluvias y tormentas eléctricas en el país durante los próximos tres días.