La Comisión ha preferido no vaticinar futuros escenarios, pero ha recordado el “valor diplomático” de Groenlandia para Europa
La Comisión Europea salió este jueves en defensa de la soberanía de Groenlandia, pero intentando evitar un enfrentamiento directo con Donald Trump quien el próximo 20 de enero volverá a convertirse en presidente de Estados Unidos, informaron medios de prensa i nternarnacional.
La portavoz del ejecutivo comunitario, Anitta Hipper ha asegurado que este territorio perteneciente a Dinamarca es un «valor diplomático clave para el bloque», pero ha preferido no vaticinar posibles escenarios.
Este pasado martes, el magnate estadunidense no descartó hacerse con el control de territorio, al que considera «clave para la seguridad estadounidense» y recurrir a la coerción económica y militar si Dinamarca se sigue negando a su venta. En los últimos días, Trump también ha hecho declaraciones semejantes sobre Canadá y el Canal de Panamá.
Bruselas prefiere no elevar el tono, antes incluso de que Trump comience su mandato, y la máxima parece ser evitar el choque de trenes y seguir manteniendo los canales de comunicación abiertos. «Ha habido muchas amenazas que no se han materializado y no vemos la necesidad de ir más allá», ha asegurado la portavoz jefe Paula Pinho.
En el año 2019, Trump ya esbozó la idea de hacerse con Groenlandia, a pesar de que primera ministra de Dinamarca, Mette Frederiksen, insiste en que este territorio no está a la venta y que elegir su futuro corresponde a sus habitantes, aunque está «abierta al diálogo» sobre cooperación en el Ártico.
A pesar de la prudencia en las respuestas, la Comisión Europea sí ha aclarado que Groenlandia queda protegida bajo el paraguas del artículo 42.7 de los Tratados europeos que consagra la defensa mutua de los Estados ante un ataque extranjero.
Esa isla, la mayor del mundo, es un territorio autónomo dependiente de Dinamarca y rica en materias primas, sobre todo de las denominadas tierras raras, imprescindibles para el desarrollo de sectores clave del siglo XXI como las baterías de los coches eléctricos, las pantallas o los teléfonos móviles.
La isla, de tan solo 57,000 habitantes, no forma parte del territorio de Dinamarca, pero su estatus oficial es de nación constituyente dentro del Reino danés que incluye a Dinamarca, Groenlandia y la Islas Feroe. Groenlandia fue colonizada por los vikingos en el siglo X.