FCC Construcción, que tiene entre sus propietarios al mejicano Carlos Slim, ubicado entre los 10 hombres más acaudalados del mundo según la revista Forbes, fue la responsable de la construcción de los Corredores Vía Brasil I y II, cuyas obras juntas tuvieron un costo de 455 millones 736 mil 952 dólares
Ocho meses más tarde que la Contraloría General de la República hiciera público los resultados de los áuditos practicados a cinco obras de infraestructuras desarrolladas durante la pasada administración de gobierno en las que se encontraron sobreprecios por el orden de $318,381,530 millones, la citada entidad fiscalizadora no ha remitido esa información al Tribunal de Cuentas.
Ese informe contempla los hallazgos de las investigaciones que fueron blanco las siguientes obras:
Obra Compañía responsable
Corredor Vía Brasil I y II FCC Construcción
Cinta Costera III Norberto Odebrecht
Conservación del Patrimonio Histórico Norberto Odebrecht
Ampliación de la Ave. Domingo Díaz Consorcio la mejicana ICA y la tica MECO
La citada investigación de la Contraloría – en manos del Ministerio Público- determinó que la empresa constructora que obtuvo el mayor porcentaje de sobreprecios, tras el audito practicado, no fue el gigante brasileño Norberto Odebrecht ―envuelto en un escándalo de sobornos internacional― sino que la compañía que se alzó con el primero lugar en ese reglón fue la española FFC Construcción.
La española FCC Construcción
FCC Construcción, que tiene entre sus propietarios al mejicano Carlos Slim, ubicado entre los 10 hombres más acaudalados del mundo según la revista Forbes, fue la responsable de la construcción de los Corredores Vía Brasil I y II, cuyas obras juntas tuvieron un costo de 455 millones 736 mil 952 dólares.
Esa cantidad representa el 26.33% del monto total de las cinco obras auditadas que, según la Contraloría, fue de $1,739,953,906.
Corredor de Vía Brasil I, según el reporte de la Contraloría, tuvo un costo de $239,462,000. En el informe de esa misma entidad, sin embargo, se estimó que el “precio razonable” para la construcción de esa obra era de $168,854,652. Ese monto representa de un “sobreprecio” de $ 70,607,348 de acuerdo con el reporte oficial.
Esa diferencia entre el precio final y el precio razonable, según la Contraloría, representa el 29.5% de “sobreprecio”.
Vía Brasil Corredor II tuvo un precio final de $216,274,952. En su informe, la Contraloría adujo que el “precio razonable” de esa obra era $174,513,941, un 19.3% de “sobreprecio”.
La constructora Odebrecht
Norberto Odebrecht, por su parte, tuvo la responsabilidad de la construcción de la Cinta Costera III a un costo de $782,146,976, mientras el proyecto identificado como Conservación del Patrimonio Histórico incluyó trabajos en el Casco Antiguo, situado en el corregimiento de San Felipe y en la comunidad de Panamá Viejo, en Parque Lefevre. Allí se halla el sitio arqueológico de Panamá la Vieja. Esta última obra tuvo un precio final de $255,498,701.
Personal encargado del audito determinó que el precio razonable de la construcción de la Cinta Costera III es de $782,146,976, y situó el denominado “sobreprecio” en $107,128,429 al considerar que el “precio razonable” de construcción de esa obra era $675,018,547. Eso representa un “sobreprecio” de 13.7%.
Preservación del Patrimonio de la ciudad, la otra de las obras llevada a cabo por Odebrecht, tuvo un precio final de $255,498,701, y su “precio razonable”, según la Contraloría, debió ser de $ 204,001,961. La diferencia entre el precio final y el precio razonable fue de $51,496,740, un 20.2% de “sobreprecio”.
En conclusión, la Contraloría estimó que las dos obras desarrolladas por la constructora española FCC Construcción tuvieron un porcentaje de sobreprecio de 48.8%, mientras que los dos proyectos de la constructora Odebrecht sobrepasaron los precios en un 33%.
La mancuerna Ica- Meco
La ampliación de la Avenida Domingo Díaz estuvo a cargo del consorcio conformado por la mejicana Ica y la costarricense Meco. Según la Contraloría en esa obra hubo un “sobreprecio” de 19.9%.
Tras concluir su tarea, la Contraloría estimó que el sobreprecio de las cinco obras auditadas fue de $318,381,530, un 18.4% del precio final que estuvo en $1,739,953,906.