La cápsula de carga Dragon, de la compañía SpaceX, se acopló este domingo a la Estación Espacial Internacional (ISS), aportando provisiones y experimentos para los astronautas que se encuentran en órbita
“Dragon instalada”, dijo un comentarista de la NASA a las 13H26 GMT una vez que se completó el delicado proceso de acoplamiento de ambos aparatos, que duró varias horas.
Anteriormente, cuando la cápsula Dragon llegó, el brazo robótico de la estación, operado por uno de sus astronautas, había capturado la cápsula de carga no tripulada, mientras flotaba sobre Australia y Papúa Nueva Guinea.
“Es un día formidable para ver a la Dragon en la ISS de nuevo”, dijo otro comentarista de la NASA.
Esta nave reciclada fue lanzada el viernes cargada con unos 2.200 kilogramos de comida, provisiones y experimentos, incluidos uno para estudiar el cáncer de tiroides y otro para cultivar cebada en el espacio.
Fue la primera vez en que SpaceX lanzaba un cohete y una cápsula de carga que ya habían volado anteriormente.
La compañía SpaceX, con sede en California y dirigida por el multimillonario Elon Musk, busca reducir los costos de los vuelos espaciales al reutilizar costosos equipos.
Esta fue la 14 ocasión de este año en que SpaceX recupera un cohete acelerador tras un lanzamiento, pues el viernes el que fue usado para impulsar a la cápsula Dragon aterrizó de vuelta de forma controlada en Cabo Cañaveral, Florida.
La Dragon ya había viajado a la ISS en 2015.
La NASA es el cliente más importante de SpaceX y esta misión es la 13 de 20 en el marco de un contrato entre las partes por 1.600 millones de dólares.
La llegada de la cápsula ocurre a la vez que un cohete ruso Soyuz con tres astronautas a bordo despegó este domingo de Kazajistán, con destino a la ISS.