Después de la luna de miel, el exdiputado Pedro Miguel González le había declarado la guerra a Varela y usaba cuanto escenario le fuera posible para atacar su gobierno
Durante el quinquenio del varelismo, las relaciones con la Asamblea Nacional se caracterizaron por el chantaje político, luego de la ruptura en enero del 2018 del llamado pacto de gobernabilidad.
Según registros de los Varelaleaks, el expresidente Juan Carlos Varela justificó la acción diciendo que si no pactaba con diputados opositores “se venía abajo el sistema”.
Pero el chantaje también venía de parte de la bancada panameñista. El miércoles 17 de diciembre del 2017, el exministro de Economía y Finanzas, Dulcidio De la Guardia, le dijo que el exdiputado panameñista Luis Barría “me ta llorando” porque tiene una serie de traslados de partidas que debían aprobar dos días más tarde y que “no había manera de que se los aprueben a menos que le soltemos una ayuda de bonos a los ocho miembros de la Comisión de Presupuesto”.

“¿Cuánto es?”, preguntó Varela. “Tamos hablando como de $250,000”, dijo De la Guardia. “Que va, demasiado. Que haga lo que quiera hacer. Eso es chantaje”, planteó Varela. “La verdad que ese man (Barría) ya cansa”, repuso De la Guardia.
En agosto de ese mismo año, De la Guardia le había informado a Varela que “Barría me está pidiendo $600,000 más para la Comisión de Presupuesto, ¿proceso o no?”. ”Si tienes que darle, procede”, contestó el exgobernante.
Meses antes, De la Guardia le dijo a Varela que “después de otros acuerdos de apoyo”, los exdiputados Jorge Iván Arrocha y Beby Valderrama le habían pedido $300,000 adicionales cada uno para las comisiones de Presupuesto y Economía. “El chantaje de la Asamblea y el desconocimiento de vida pública de muchos funcionarios hace esto”, respondió Varela.

En julio del 2017, el exdiputado panameñista Carlos Santana, le escribió al exgobernante: “Barría y Arrocha se tomaron presupuesto para seguir haciendo fiesta”. En marzo del 2018, Varela reconoció que la Asamblea Nacional estaba chantajeándolo porque quería un aumento de $20 millones en el nuevo presupuesto.
Para entonces, después de la luna de miel, el exdiputado Pedro Miguel González le había declarado la guerra a Varela y usaba cuanto escenario le fuera posible para atacar su gobierno. “Jefe, Dulcidio (De la Guardia) y FH (el excontralor Federico Humbert) opinan que en vista de las declaraciones de González debemos dejar a los representantes y alcaldes del PRD fuera de los $10,000 que se van a repartir. Pienso que puede ser válido lo que plantean”, le escribió el exministro de la Presidencia, Álvaro Alemán.
“Ese tipo es un estúpido, un maricón. Mal agradecido de mierda”, fue la reacción del diputado Popi Varela. “Estúpido, ese tipo”, añadió el expresidente. La recomendación de su hermano era “parar todo y para la verga”.
El exmandatario asintió: “Le paro todos los proyectos en los circuitos de ellos. Estoy agotado ya de este chantaje”. Popi Varela dijo que estaba cansado de “mamar huevo a dos manos” para la aprobación de proyectos de ley o traslado de partidas.

Carlos Santana.
Varela le comentó a Roberto Eisenmann, en marzo del 2018, que González estaba “usando la relación sentimental” de su sobrino el exdiputado del PRD, Quibián Panay, con la exdiputada Ábrego para controlar la Asamblea Nacional.
Un mes antes Varela le había comentado al exdiputado Juan Carlos Arango que “Yanibel (Ábrego) está cayendo en el juego de Pedro Miguel a través de Quibián”. “La cara de Pedro es lo que se refleja en televisión como imagen de la Asamblea. Eso le hace daño a la Asamblea”, añadió. Ábrego y Panay se casaron en febrero del 2020.
El papel opositor de González era también objeto de comentario entre Varela y funcionarios de la embajada de Estados Unidos en Panamá. El expresidente le comentó, en diciembre del 2017, al exembajador Feeley que el diario La Estrella estaba usando “un prófugo de la justicia americana”. “Amigos comunes, míos y tuyos, mandaron a Pedro Miguel de kamikaze”, añadió.
También en esos días, el expresidente tuvo un intercambio con Eisenmann. “Presidente, de acuerdo, que no debe contestar el show político de sombrerito” (en referencia a González)”, le escribió el empresario.

Varela le repitió que “el secretario general del PRD es prófugo de la justicia americana y no acepta los serios problemas que tiene en su partido el narcotráfico”.
González mantiene un juicio abierto en Estados Unidos por el supuesto asesinato de un soldado estadunidense durante la invasión militar de 1989. Washington no aceptó el resultado del juicio llevado a cabo en 1997 en Panamá, que lo absolvió, considerándolo como falto de transparencia porque el PRD influyó en todo el proceso.
En ese mes, diciembre del 2017, el excontralor Freddy Humbert advirtió al expresidente que los diputados “están algo irritados” porque “primarias sin $ es una némesis”. “Su mayor problema es que están hasta la wacha sin dinero en plenas primarias”, añadió.
En ese momento Varela le comentó que había tenido que presionar a la exdiputada de Cambio Democrático, Dana Castañeda, que presidía la Comisión de Economía y Finanzas.
Humbert le dijo que Castañeda quería que le nombrara 100 personas. “Se las estoy aprobando, pero a cuenta gota. Dile que tú me vas a hablar y yo le flexibilizo un poco la otra semana. Gánate tú la buena voluntad”, le sugirió el excontralor.

Popi Varela también buscaba apoyos para los diputados. Pidió que el expresidente autorizara un SPI extra al diputado del PRD, Raúl Pineda. “Xuzo, pero que nos ayuden. Esa gente pide cosas y no ayudan”, le planteó.
Solicitó también pagar una deuda por $124,000 en el Hospital Nacional a hija del diputado del PRD, Nelson Jackson. El exdiputado del Molirena, Miguel Fanovich, pidió cupos de taxis y apoyo de $12,000 para una operación, según registros de los Varelaleaks.
En septiembre del 2017, Humbert le comentó al expresidente que el diputado Popi Varela “ya no me quiere cuidar el ganado de la Asamblea”. “No sale de la finca. Y el nuevo cuidador es duro, jajaja”, le comentó Varela.
En ese momento la exdiputada Ábrego era la presidenta de la Asamblea Nacional y se reeligió para el siguiente periodo.
