Con muy buenas relaciones con el presidente del Partido Panamenista, José Luis Varela, Muñoz encabezó la lista de beneficiados con millonarios fondos públicos en el quinquenio pasado
La cacareada independencia del poder concentrado en el Ejecutivo del recién nacido Partido Alianza, que encabeza el veterano diputado José Muñoz pereció más rápido de lo que se persigna un ñato.
Muñoz, que fue uno de los más entusiastas impulsores de la ruptura en gobierno de la coalición entre Cambio Democrático y el Partido Panameñista aquel 30 de agosto de 2011, anunció el refrendo con su voto en la Asamblea de la propuesta de las dos nuevas magistradas de la Corte Suprema de Justicias empujadas por el gobierno de Juan Carlos Varela.
Miembro de varios partidos políticos desde su salto a la política partidista en el año 1994 como representante del corregimiento capitalino de Tocumen en representación del desaparecido Partido Solidaridad, Muñoz cumplió un viejo sueño al crear su propio partido político bautizado con el nombre de Alianza en el que cargos claves en la estructura de poder son ocupados por miembros de su círculo de familiares más cercanos.
En esa lista de privilegiados e intocables, cuyo destino real de esos fondos no ha sido investigado ni por la Corte Suprema de Justicia, el Tribunal Electoral ni la Contraloría General de la República, también aparecen los nombres del propio diputado Varela -hermano del actual Presidente de la República- y Alcibiades Vásquez, ministro de Desarrollo Social ( Mides) y fiscal en la junta directiva del oficialista Partido Panamenista.
José Muñoz, albañil de profesión, es hoy un acaudalado dirigente político que cuenta con su propia organización, que navega con facilidad en el mar de las negociaciones en busca de alianza en el océano de intereses que alienta la nave de la política panameña.