El director del Instituto Guatemalteco de Migración asegura que la recepción digna y la reinserción social han reducido el número de deportados
El número de guatemaltecos que intentan regresar a Estados Unidos después de ser deportados ha disminuido, según Alfredo Danilo Rivera, director del Instituto Guatemalteco de Migración, quien atribuye esta reducción al nuevo modelo de atención impulsado por el gobierno del presidente Bernardo Arévalo de León, informó la agencia EFE.
Rivera aseguró que también se ha reducido la migración general hacia Estados Unidos, aunque aclaró que aún no existen cifras oficiales sobre este fenómeno, lo que sí está documentado es el descenso en las deportaciones, entre enero y el 21 de septiembre del 2025, fueron retornadas 30,323 personas, un 37% menos que en el mismo periodo del 2024 (48,016 deportados), y por debajo de los 35,515 registrados en el 2023.
El funcionario explicó que el nuevo modelo no solo busca ofrecer una recepción digna, sino también fomentar la reinserción económica y social de los migrantes retornados.

Esto incluiría el acceso a empleo, educación, servicios legales y certificación de habilidades laborales, a través del Centro de Atención y Registro, cuya cobertura ha pasado del 35% al 82% de las personas deportadas. “Antes solo ofrecíamos atención humanitaria básica en la Fuerza Aérea. Hoy les damos seguimiento real”, explicó Rivera.
Además, el perfil del migrante retornado ha cambiado, más del 70% proviene del interior de Estados Unidos, no de la frontera, lo que implica que estas personas han adquirido experiencia laboral que el gobierno busca aprovechar.
Uno de los pilares del Plan Retorno al Hogar es combatir la estigmatización de los retornados, frecuentemente asociados con la delincuencia. Rivera destacó que en realidad “son trabajadores que buscan oportunidades” y que el nuevo enfoque busca conectarlos con el sector privado.

Actualmente, los sectores que más emplean a migrantes retornados son la construcción, seguridad, agroindustria y servicios administrativos. Para mejorar sus capacidades, el gobierno, en alianza con el Instituto Técnico de Capacitación y Productividad (INTECAP), ha destinado unos $3.9 millones en programas de capacitación laboral.
Durante el 2024, Guatemala registró casi 62,000 deportaciones desde Estados Unidos, el objetivo del nuevo modelo es evitar que esas cifras se repitan y ofrecer alternativas reales dentro del país para quienes regresan tras una experiencia migratoria fallida o forzada.
