El ejército israelí pide a los activistas que cambien de rumbo mientras 20 barcos se acercan a la flotilla
La gran flotilla multinacional que intenta desafiar el bloqueo marítimo que Israel impuso en la Franja de Gaza hace casi 20 años, rechazó los llamamientos de Italia para detenerse el martes por la noche y los de Grecia el miércoles, ya que se acerca a una “zona crítica” en la que Israel tomará medidas para detener su avance, informó el diario La Razón.
Las autoridades israelíes se han estado preparando para interceptar a las 47 embaraciones y llevar a los más de 500 activistas de la Flotilla Sumud a tierra para ser deportados o detenidos, en una compleja operación que podría suceder durante Yom Kipur, el día más sagrado del año para el judaísmo, que comenzó el miércoles por la noche y dura todo el jueves hasta el atardecer. Es el día de la expiación en el que todo el país se detiene, no hay transporte ni por cielo ni mar ni tierra, tampoco comercio, los medios de comunicación enmudecen y el país queda silencioso.
La flotilla está escoltada por un buque de la Armada española y dos de la italiana, cuyos respectivos gobiernos han aclarado que no se espera que empleen la fuerza militar y también que dejarán de seguir a la flotilla una vez que se acerque a 278 kilómetros de la costa.
La Armada israelí, efectivamente, se dispone a interceptar los barcos antes de que arriben. En el pasado lo ha hecho con otras flotillas impidiendo que los activistas se acercaran a la costa de Gaza.
Las autoridades israelíes refieren a las flotillas como maniobras publicitarias y el martes el Ministerio de Exteriores israelí acusó a algunos participantes, entre los que hay políticos y abogados, de tener vínculos con Hamás.
El portavoz de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI), el general de brigada Effie Defrin, declaró la semana pasada que la Armada estaba lista para interceptar las embarcaciones, sin embargo, también señaló que, debido a la cantidad de buques, esta flotilla representa un desafío mayor que las expediciones anteriores.
Se espera que la Armada aborde los barcos, detenga a los activistas y los conduzca a un gran buque militar que los trasladará al puerto de Ashdod para después deportarlos.
Fuentes militares dijeron a la radio del Ejército que algunas de las embarcaciones podrían ser remolcadas al mismo puerto, aunque otras fuentes militares indicaron que se prevé que algunos barcos sean hundidos por la Armada.
Unos 600 policías participarán en las labores de traslado de los activistas, según informó la radio estatal Kan. Desde el puerto de Ashdod serán trasladados a un centro en el sur de Israel durante el festivo de Yom Kipur, y los que quieran ser deportados, serán enviados a sus países respectivos el jueves por la noche, cuando finalice la fiesta.
Los que se nieguen a la repatriación serán procesados por personal del Ministerio del Interior a través de un tribunal especial que se formará en la cárcel de Ketziot, como sucedió en la última flotilla en la que también participó la conocida activista medioambiental sueca Greta Thunberg.
El informativo del canal 12 reveló que habrá alrededor de ocho ambulancias cerca de la costa en caso de que los participantes necesitaran atención médica, y que varios hospitales en diferentes lugares del país se encontraban en alerta máxima.