La institución benéfica analiza también un aumento en los premios oficiales para incentivar la compra legal
La Lotería Nacional de Beneficencia (LNB) adoptará nuevas medidas para combatir la venta y compra de billetes clandestinos, un fenómeno que afecta las finanzas del Estado y la beneficencia pública, informó este viernes su directora, Saquina Jaramillo.
Esta práctica será perseguida como delito económico y de blanqueo de capital, castigando tanto a quienes venden como a quienes compran, señaló Jaramillo en TVN Noticias,
“Se castiga al que vende como al que compra, porque no habría venta sin comprador. Lo hemos tratado de manejar dentro del código penal en el orden de los delitos económicos y blanqueo de capital”, declaró Jaramillo.

La titular de la entidad también hizo un llamado a la banca nacional, advirtiendo que muchas de las operaciones relacionadas con la lotería ilegal se canalizan a través de plataformas bancarias para el pago de premios. “Ellos tienen manera de detectar qué comercios realizan estas prácticas”, señaló, subrayando que los bancos deberían aplicar los mismos controles de justificación de fondos a estos comercios que a los ciudadanos comunes.
La venta clandestina de lotería, que incluye la Tica, la Nica y otros juegos extranjeros, ha sido detectada en todo el país, especialmente en las provincias de Chiriquí y Veraguas, donde se han ejecutado múltiples operativos.
Jaramillo destacó además lo irónico de la situación: en algunos casos, billeteros oficiales han sido sorprendidos con libretas de números ilegales en sus tableros, participando activamente en la distribución de estos productos prohibidos.

Mientras refuerza su ofensiva contra el comercio ilícito, la LNB también evalúa un posible incremento en los premios de los sorteos oficiales, con el fin de incentivar al público a comprar únicamente billetes legítimos.
Con estas acciones, la institución busca proteger los fondos públicos destinados a la beneficencia y erradicar una práctica que no solo representa pérdidas millonarias, sino que también alimenta circuitos informales con posibles vínculos al lavado de dinero, concluyó Jaramillo.
