MIAMBIENTE anuncia el cierre por un año de la isla Escudo de Veraguas y la eliminación de plásticos de un solo uso en parques nacionales
El cierre temporal de la isla Escudo de Veraguas y la prohibición del uso de plásticos desechables en parques nacionales y áreas protegidas a partir de enero del 2026 son las nuevas medidas con las que Panamá reafirma su compromiso ambiental, según destacó el ministro de Ambiente, Juan Carlos Navarro.
El ministro explicó que ambas decisiones buscan endurecer la lucha contra la contaminación, proteger los ecosistemas más frágiles y avanzar hacia un modelo de desarrollo sostenible y responsable.
“Había una situación en Escudo de Veraguas en que lamentablemente estaba entrando cualquiera, tirando anclas sobre los arrecifes. Había pesca con cloro y captura de langosta dentro de un área protegida. Escuchando a las autoridades locales, decidimos cerrar la isla por un año para permitir que su ecosistema se recupere”, señaló Navarro.

El cierre temporal de la isla, ubicada en la provincia de Bocas del Toro, fue una solicitud de las autoridades locales ante la creciente presión humana sobre un territorio considerado uno de los más biodiversos y sensibles del país.
La medida busca detener la degradación ambiental causada por actividades no reguladas y permitir la recuperación de los ecosistemas marinos y costeros.
Además, Navarro anunció una nueva disposición ambiental que entrará en vigor el 1 de enero del 2026, mediante la cual se prohibirá el ingreso de envases plásticos de un solo uso a parques nacionales y áreas protegidas.

“Queremos dar el ejemplo desde el Ministerio de Ambiente (MIAMBIENTE). A partir del primero de enero del 2026, ningún visitante podrá ingresar con plásticos desechables. Solo se permitirá el uso de termos metálicos u otros recipientes reutilizables”, indicó el ministro.
La prohibición de plásticos busca reducir los residuos que contaminan playas, ríos y bosques, especialmente aquellos generados por los visitantes en sitios naturales.
Con estas acciones, MIAMBIENTE refuerza la política nacional de protección ecológica y economía circular, marcando un paso firme hacia una Panamá más verde, sostenible y consciente de la importancia de conservar su riqueza natural.
