Expertos alertan sobre falta de liderazgo joven, crisis interna y ausencia de rumbo claro hacia las elecciones del 2029
Los recientes procesos de renovación transitoria dentro del Partido Revolucionario Democrático (PRD) y el Partido Panameñista no han logrado generar expectativas de transformación, pese a las fuertes derrotas electorales del 2024, informó el diario Panamá América.
Lejos de proyectar nuevos liderazgos, ambos colectivos siguen sumidos en una crisis de falta de credibilidad, desgaste interno y ausencia de relevo generacional, según coincidieron analistas y dirigentes consultados.
El experto en política Juan McKay cuestionó que, pese al duro revés en las últimas elecciones, la dirigencia de ambos partidos no muestre una incorporación proporcional de figuras jóvenes.
Asimismo, expresó preocupación por la permanencia de políticos envueltos en problemas legales que, aunque no condenados, sí enfrentaron el escarmiento público. “Deja mucho que desear”, afirmó sobre el rumbo de las renovaciones.
McKay reconoció la trayectoria política de Balbina Herrera en procesos de reestructuración previos dentro del PRD, pero indicó que habría tenido mejores resultados si se hubiera rodeado de una generación nueva que impulsara ideas frescas.
En el Panameñista, señaló dudas sobre la capacidad del actual presidente de la Asamblea Nacional (AN) para reorganizar el partido mientras mantiene sus funciones legislativas y la gestión interna del Órgano Legislativo.
El analista concluyó recomendando que ambos colectivos deben invertir en la formación de jóvenes, con el fin de promover una verdadera renovación política.
Por otro lado, el dirigente panameñista Jorge Gamboa Arosemena responsabilizó directamente a Juan Carlos Varela y Mireya Moscoso por la crisis del partido, que suma dos periodos lejos del poder.
“Tiene que haber arrepentimiento de todos los que enterraron el panameñismo y los demás partidos; deben reconocer sus errores. Todos son culpables de la crisis en que está el país”, expresó.
En tanto, Xavier Sáez Llorens se mostró aún más crítico, advirtiendo que Panamá enfrenta un futuro político incierto al mantener los mismos nefastos personajes de siempre al frente del PRD y el Panameñista.
Sin un relevo generacional que inspire honradez, capacidad y ética, afirmó, no hay perspectivas alentadoras hacia el 2029. Ambos partidos deberán celebrar sus congresos ordinarios en dos años, cuando se espera que ya definan su estrategia para las elecciones generales del 2029.
Mientras tanto, el calendario político del 2025 cerrará el 13 de diciembre, cuando el Partido Popular celebre su convención ordinaria para renovar su estructura. Seis candidatos compiten por la dirigencia, incluido su actual presidente, Daniel Brea.