El dictador Putin ha asegurado que nunca han tenido intención de iniciar una ofensiva en Europa
El dictador, Vladímir Putin, descartó este jueves un cese de las hostilidades en Ucrania hasta que las tropas ucranianas no se retiren de las cuatro regiones anexionadas por Rusia en el 2022, informó el diario La Razón.
“Si las tropas de Ucrania se repliegan de los territorios que ocupan, entonces cesarán los combates. Si no se van, lograremos eso por la vía militar”, dijo Putin durante una rueda de prensa en Kirguistán transmitida en directo por la televisión rusa.
Además, el dictador ruso se mostró dispuesto a incluir en un futuro acuerdo de paz el compromiso de Rusia de no atacar a Europa.
“Decir que Rusia no tiene intención de atacar a Europa, para nosotros es algo que suena gracioso. Nunca tuvimos esa intención. Pero si quieren escuchar eso de nosotros, pues vamos a fijarlo en papel. No hay ningún problema”, añadió

En cuanto a la posición de la Unión Europea (UE) respecto al conflicto ucraniano y su actitud beligerante hacia Rusia excluyen su participación en el plan de paz, según afirmó el viceministro de Exteriores ruso Alexandr Grushkó, durante una intervención en la Duma o cámara de diputados de Rusia, según recoge la agencia EFE.
“Si nos referimos a la posición actual de la UE, no es más que retórica, lo que excluye cualquier lugar para Europa en la mesa de negociaciones”, aseveró ante los diputados.
Según el alto representante diplomático ruso, “prácticamente todos los días se escuchan desde allá (la UE) declaraciones infundadas de que no habrá paz sin Europa”. “Pero si nos fijamos en las posiciones reales, declaradas por los líderes europeos, en realidad excluyen la posibilidad de lograr esa paz”, señaló.
En particular, acusó a los líderes europeos de “declarar la guerra a Rusia”.
Los líderes europeos debatieron el pasado domingo en Ginebra con representantes de Estados Unidos el plan de paz presentado por el presidente estadunidense, Donald Trump, del que habrían sido eliminados varios puntos como los relativos al ingreso de Ucrania en la UE y la OTAN, y modificado otros, como el número de efectivos del Ejército ucraniano tras el fin de la guerra.
Rusia, por su parte, continúa ciñéndose a la primera versión del plan de paz de 28 puntos, que vincula a los acuerdos alcanzados durante la cumbre ruso-estadunidense en Alaska.
El plan presentado originalmente por Washington fue muy criticado por Europa al considerar que era muy favorable a Moscú al exigir a Kiev reducir su Ejército, ceder territorio a Rusia y renunciar al ingreso en la OTAN.
