Un vecino de los fallecidos contó que al escuchar el intercambio de palabras resguardo a dos menores de edad, los únicos sobrevientas de la familia tras la tragedia.
La ola de violencia doméstica en el país sigue dejando secuelas irreparables. Esta vez la tragedia acabo con la vida de tres integrantes de una familia que residía en la barriada Santa Clara, en el sector de Cabra de Pacora.
Los celos fueron el detonante, para que Héctor Osvaldo Morales; de 40 años de edad y cabeza de la familia diera muerte con un arma blanca a su esposa Lizbeth Cruz; de 40 años de edad y a su hijastro José Gabriel Hernández; de 20 años.de edad, quien intercedió en la pelea de sus padres.
Esto, provocó que Morales procedió a acabar con su vida, primeramente, causándose una herida en el cuello y finalmente logró su objetivo, colgándose en una de las habitaciones de su vivienda.
El hallazgo deja en la orfandad a dos menores de edad; de 16 y siete años de edad, respectivamente.
Lamentable.. Reportan violencia doméstica en Santa Clara de Pacora… Hecho termina en doble homicidio y suicidio… pic.twitter.com/JB5LyxIVbl
— GRUPO ELITE 507 (@grupoelite507) 2 de febrero de 2018
SUCESO
Los hechos trascendieron a las 7:30 a.m., de este viernes, 2 de febrero, cuando los vecinos de la familia Moreno Cruz , escucharon una inusual discusión, en la casa de los hoy occisos. Los vecinos dieron la voz de alerta a las autoridades policiales con una llamada al 104, para informar que en la barriada se estaba registrando un caso de violencia doméstica,
Agentes de la Dirección de Investigación Judicial, llegaron al área donde escucharon el testimonio de Marco Manyoma, de 35 años, vecino de los fallecidos.
Manyoma contó que al escuchar el intercambio de palabras resguardó a dos menores de edad, los únicos sobrevientas de la familia e hijos de la pareja fallecida, Los infantes, un niño de siete años de edad y una adolescente de 16 años de edad, relataron a Manyoma la pelea perpetrada por sus padres y su hermano.
Así las cosas, al llegar al lugar los agentes policiales detectaron en el cuarto principal de la residencia, el cuerpo de un hombre postrado en el suelo con heridas en varias partes del cuerpo, sin signos vitales.
Luego, dieron con el cadáver de una mujer que yacía en el suelo, también, con varias heridas de arma blanca. Y finalmente verificaron la última habitación de la casa, donde se encontró a un hombre colgado del tubo de un ropero.
Una ambulancia Sistema Único de Manejo de Emergencia (SUME 911), se presentó a la residencia y se dictaminó que los cuerpos -con varias heridas de arma blanca- no mantenían signos vitales.