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El Kenny Serracín: Entre promesas y espectáculos, Varela entra en la recta final

El Kenny Serracín: Entre promesas y espectáculos, Varela entra en la recta final
El Presidente varela desafió los pronósticos y se sentó entre el público en la iinauguración del nuevo Kenny Serracín. FOTO/ En Segundos

La inauguración de un monumental estadio de béisbol enmarcó lo que parece ser la novena entrada en el gobierno de Juan Carlos Varela. En el evento y la previa hubo de todo, polémicas, política y hasta  apagones

Un secretario del presidente parecía tenso, llevaba cerca de 20 minutos haciendo una llamada tras otra. El funcionario es aún un muchacho en sus 20, y  la espontaneidad de la juventud mermaba su capacidad por neutralizar  las muestras de la ansiedad por la que atravesaba en ese momento.

Se acercaba la “hora 0” y el nuevo estadio Kenny Serracín, en la ciudad de David,  no terminaba de llenarse. La hora pactada para empezar el acto de inauguración era la 6 de la tarde, pero faltaban solo minutos y todavía la cuarta parte de las vistosas gradas del nuevo templo de la pelota chiricana mostraban el verde  de sus butacas vacías.

En esos cálculos de estrategia y “momentum”, se hicieron las 7 de la noche, ya los espacios vacíos en el estadio eran menos, aún el presidente Juan Carlos Varela no llegaba al “Kenny”. La primera batalla parecía ganada, el estadio no quedaría a medio llenar, pero tras una semana de polémica en redes sociales y medios de comunicación, donde grupos opositores intentaron boicotear el acto de inauguración, aún quedaba el enfrentamiento crucial: Se arengaba por un enorme abucheo cuando el presidente Varela hiciera uso de la palabra.

Una hora y 40 minutos después de lo anunciado el espectáculo dio inicio.  No podía ser menos vistoso. Ante casi 9,000 espectadores, mientras afuera hasta se revendían boletos, que habían sido regalados,  en el histórico momento cadetes de la Policía Nacional desplegaron una inmensa bandera  en los jardines del nuevo Kenny Serracín, la multitud se emocionaba sin duda, aunque no del todo con la presentación de Osvaldo Ayála, luego en el turno de los Rabanes, faltó algo de música nueva, sin embargo  Joe Montana hizo el explotar las graderías,  pero faltaba el escollo final.

Llegando a las 9 de la noche, mientras el cardenal José Luis Lacunza, (una celebridad para los chiricanos), hacía la invocación religiosa en el acto, una falla en el suministro de energía eléctrica detonó el momento de mayor suspenso… fue el factor inesperado de la noche, los que pugnaban por un fracaso recobraron el aliento y las  vistas del Presidente y el director de Pandeportes  inquietos, detrás del podium donde Lacunza intentaba con “golpesitos” hacer funcionar el sistema de sonido, lo explican todo.

La empresa Gas Unión Fenosa explicó después que un poste  del tendido eléctrico, se incendió provocando la falla en el suministro en gran parte de la ciudad de David. Fueron minutos cargados de tensión, pero pronto se normalizó la energía y como dicen en el  teatro “el show debe continuar”. Así fue. El protocolo siguió su curso y le llegó el turno de hablar a Varela, los medios a la expectativa ante la amenaza de abucheo. El Presidente empezó a hablar… nada pasó…. El siguió su discurso destacando la importancia de esa obra de 16.2 millones de dólares; a mitad del discurso  algunos aseguran que alguna muestra de repudio se dio pero que no llegó a interferir en el programa, Luego en una entrevista al periodista Hugo Famanía, Varela dijo que allá en la segunda base, en medio del cuadro  en forma de diamante, “no escuchó nada”.

Confiado en eso, o como estrategia, Varela hizo la movida final. Decidió sentarse entre el público junto al cardenal Lacunza, de camino en el recorrido por las gradas aprovecho para saludar a todo el que pudo, tomarse fotos, y besar a los niños. Una vez en su butaca, se puso una gorra del equipo de Chiriquí y la sombra del abucheo se desvaneció, Al igual que aquella vez el hipódromo hábilmente salió ileso del Kenny Serracín.

El Presidente Juan Carlos Varela, estuvo con el público durante el juego inaugural del nuevo Estadio Kenny Serracín. Foto / Secretaria de Metas
Un espectáculo de fuego artificiales formó parte del acto inaugural del nuevo Kenny Serracínn en Davíd, Chiriquí. FOTO/ Secretaria de Metas
En el acto inaugural la policía deslplegó una gigantesca bandera en los jardines del nuevo Kenny Serracín. FOTO/ Secretaría de Comunicación
Se calcula que unas 9, 000 personas asistieron al acto inaugural del Kenny Serracín en David, Chiriquí el 23 de marzo de 2018. FOTO/ Secretaría de Comunicación
El presidente Juan Carlos Varela, hizo uso de la palabra sin contratiempos durante el acto inaugural del nuevo Kenny Serracín. Foto / Secretaria de Metas.
El Presidente Juan Carlos Varela, estuvo con el público, junto al Monseñor José Luis Lacaunza, durante el juego inaugural del nuevo Estadio Kenny Serracín. Foto / Secretaria de Metas
El presidente durante los actos inaugurales del nuevo estadio de béisbol de Chirquí, en la ciudad de David. FOTO/ Secretaria de Metas.
Se calcula que unas 9, 000 personas asistieron al acto inaugural del Kenny Serracín en David, Chiriquí el 23 de marzo de 2018. FOTO/ Secretaría de Comunicación
Imagen del Estadio Kenny Serracín Foto/ Secretaría de Comunicación
El Presidente Juan Carlos Varela, estuvo con el público durante el juego inaugural del nuevo Estadio Kenny Serracín. Foto / Secretaria de Metas
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Más tarde en el palco principal,  donde  concedió la entrevista, habló distensado y con un tono casual.  No dejó dudas de que se siente ya alistando el viaje de salida. “Nos quedan 15 meses, en el futball americano sería el ‘cuarto  Quarter’ “, dijo Varela y añadió, “hasta ahora no hemos tenido una sola situación que no se haya resuelto con consenso y quiero terminar en paz”.

Así terminó la noche del Kenny Serracín, una historia que tuvo suspenso, drama y acción. Varela regresó en el palco a vestir una camisa del equipo de Herrera ( su provincia ) y una gorra de Chiriquí que al final  ganó el partido, 5 -2 remontando una ventaja 2-0 de los herreranos al comienzo del encuentro.

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