El gobierno de Colombia y el ELN retomaron el jueves sus diálogos en La Habana en busca de un cese al fuego que garantice tranquilidad durante las presidenciales de mayo, y abra las puerta para un acuerdo final que acabe con un conflicto de medio siglo
En “El Laguito”, un exclusivo recinto en el oeste de la capital cubana destinado a dignatarios, negociadores y garantes dieron inicio al quinto ciclo de conversaciones, que había quedado suspendido en abril cuando Ecuador decidió retirarse como sede de los diálogos.
“Alcanzar la paz en Colombia constituye un anhelo histórico de toda la región de América Latina y el Caribe y el Mundo”, dijo el garante cubano, Iván Mora, que presidía la mesa de conversaciones.
Sentado a la izquierda de Mora, el jefe de la delegación del gobierno de Colombia, Gustavo Bell, dijo que este quinto ciclo de reuniones busca “acordar un cese al fuego más robusto”, que “permita llegar a las elecciones en absoluta paz” y que ponga fin a “secuestros, extorsiones, reclutamiento de niños”, y “ataques a la infraestructura”.