Hawái registraba este jueves las primeras lluvias torrenciales previas a la llegada del feroz huracán Lane al archipiélago, donde ya fue declarado estado de emergencia por el presidente Donald Trump.
El huracán de categoría 4 amenaza con vientos de hasta 215 km/h, copiosas precipitaciones y olas peligrosas.
Su curso es errático y cambiante, pero “lo que es seguro es que Hawái será impactado por el huracán Lane”, dijo el jefe de la Agencia Federal de Emergencia (FEMA), Brock Long, en una rueda de prensa en Washington.
Indicó que en Isla Grande, la primera que será impactada, se registraron 305 mm de lluvia.
“Nos preocupa en extremo la posibilidad de inundaciones tierra adentro, derrumbes y daños a la infraestructura de comunicaciones y transporte”, señaló Long.
La televisión KITV de ABC informó de algunos derrumbes que bloquearon vías en Isla Grande.
Se esperaba que Lane golpee muy cerca de las principales islas de Hawái en la tarde de este jueves y el viernes.
Steve Goldstein, del Servicio Nacional de Meteorología (NWS), dijo que Lane –localizado unos 320 km al sur de Hawái– se acercaba con vientos de hasta 200 km/h.
“Estará muy cerca de las islas hawaianas y tendrá un gran impacto. No necesitas un contacto directo [con el ojo] para tener grandes efectos. Habrá mucha lluvia en todas las islas en los próximos días”, señaló.
Los huracanes rara vez tocan tierra en Hawái, donde la última gran tormenta en azotar el estado se registró hace casi tres décadas, cuando el huracán Iniki llegó a la isla de Kauai, dejando seis personas muertas y causando daños por miles de millones de dólares.
La Casa Blanca informó que el presidente declaró el estado de emergencia en Hawái, lo que permite desbloquear fondos federales ante el inminente paso del huracán en el archipiélago.
El mandatario exhortó antes a los residentes del archipiélago a prepararse para Lane, mientras que la Marina estadounidense informó que está moviendo algunos de sus barcos y submarinos para evitar que queden atrapados en el puerto cuando llegue el huracán.