“Quiero destacar que hoy también hablamos sobre temas que deben tener un buen resultado en materia comercial y en materia financiera y fiscal”, dijo Duque tras la cita.
Los presidentes de Colombia y Panamá, Iván Duque y Juan Carlos Varela, anunciaron este lunes una hoja de ruta para solucionar el conflicto comercial bilateral, en medio del reclamo de sanciones contra Bogotá por parte de empresarios panameños.
El anuncio, del que no dieron mayores detalles, se produjo tras la reunión de ambos mandatarios en el Palacio de las Garzas, sede del gobierno panameño.
“Quiero destacar que hoy también hablamos sobre temas que deben tener un buen resultado en materia comercial y en materia financiera y fiscal”, dijo Duque tras la cita.
“Creo que el haber tenido una conversación franca nos permite a nosotros establecer una hoja de ruta” para que “en los próximos meses estemos anunciando una buena noticia para nuestros dos países”, añadió Duque.
Los dos mandatarios manifestaron que la reunión se centró principalmente en temas de cooperación en la lucha contra el narcotráfico.
Sin embargo, Duque llegó a Panamá en momentos en que ambos países mantienen una disputa ante la Organización Mundial de Comercio (OMC), y en medio de reclamos por parte de los empresarios panameños para que se apliquen medidas de retorsión contra Colombia.
“En los temas muy puntuales de comercio y finanzas hemos dado instrucciones a las más altas autoridades de ambos países para que al más breve plazo busquen los mecanismos de entendimiento y establezcan un plan de acción”, indicó Varela.
Ese plan debe tener “objetivos concretos que se puedan lograr” para avanzar en la relación bilateral, añadió Varela.
La polémica surgió en 2013 cuando Bogotá impuso un arancel de 10% a productos textiles, prendas de vestir y calzados provenientes de la Zona Libre de Colón, en el Caribe panameño.
La mayoría de los productos gravados por Colombia proceden de países como China y son reexportados desde esa zona franca, que tuvo cuantiosas pérdidas por la caída de sus ventas.
Panamá denunció entonces a Colombia ante la OMC y aumentó impuestos a productos que tradicionalmente vienen de ese país, como flores o carbón.
La OMC le dio la razón a Panamá, pero Colombia decidió recurrir al considerar que la decisión “entorpece la cruzada para atacar el contrabando y el comercio ilícito”.
Bogotá, que también acusa a Panamá de dificultar el intercambio de información fiscal, eliminó el arancel, pero en noviembre de 2016 impuso otras medidas, que según Colombia, cumplen con el fallo de la OMC. El gobierno panameño consideró lo contrario y exigió sanciones comerciales por 210 millones de dólares.
– Oportunidad de “enmendar” –
La semana pasada los empresarios de la Zona Libre de Colón pidieron a Varela que “por última vez” exponga “de manera fuerte y determinante la posición panameña” ante Duque, y de no obtener una respuesta favorable, “iniciar, cuanto antes, la aplicación de medidas de retorsión efectivas”.
“Se le debe dar la oportunidad al presidente Duque de que enmiende las acciones que tuvo el presidente anterior (Juan Manuel Santos), sin embargo creo que Panamá debe considerar un tiempo perentorio”, dijo a la AFP Severo Sousa, presidente del Consejo Nacional de la Empresa Privada.
Pero si Colombia no retira sus medidas “discriminatorias”, Panamá “debiera aplicar algunas medidas de retorsión contundentes que llevaran de alguna manera a Colombia a cumplir o a pensar seriamente en cumplir los fallos de la OMC”, añadió Sousa.
La disputa ha llevado a Varela a subir el tono contra Colombia en la cooperación contra el narcotráfico: “Nosotros somos un país que no exportamos problemas”, llegó a decir.
Según Naciones Unidas, los narcocultivos se dispararon en Colombia entre 2014 y 2016 de 69.000 a 146.000 hectáreas, lo que ha propiciado que la producción haya pasado de 442 a 866 toneladas de alcaloide.