En este recurso, Panamá reclama errores en la interpretación de las normas sobre restricciones a las importaciones y de valoración aduanera, que fueron argumentadas en la solicitud de examen sobre cumplimiento de Colombia con los fallos a favor de Panamá.
Así lo anunció el ministro de Comercio e Industrias, Augusto Arosemena, quien destacó que “Panamá mantiene su posición de que las medidas aduaneras impuestas por Colombia, a los textiles y calzados, representan barreras al comercio que afectan directamente la relación comercial entre ambos países”.
Detalló que, si bien estas medidas de control aduanero afectan un grupo minoritario de productos, el MICI considera que el comercio debe ser fluido para todas las mercancías, y que estas solo deben ser valoradas y controladas según las normas internacionales que las aduanas de todos los países deben acatar.
Arosemena reiteró que el MICI continuará velando por los mejores intereses comerciales de Panamá tanto ante la OMC, como por la vía diplomática.
Cabe destacar que Colombia tuvo que modificar los aranceles excesivos en contra de textiles y calzados estableciéndolos bajo los porcentajes que se le permiten según sus compromisos ante la OMC, luego de que la demanda interpuesta por Panamá contra estas medidas arancelarias resultó a favor de Panamá tanto en primera instancia como en apelación.
No obstante, Colombia impuso un nuevo decreto en 2016 estableciendo medidas aduaneras, el cual fue demandado por Panamá.
La acción de Panamá contra las medidas arancelarias de Colombia dio como resultado una reducción significativa de los aranceles que detallamos a continuación: