Los cielos del norte chileno, donde se encuentran gran parte de los mayores instrumentos de observación astronómica, albergarán también al más potente observatorio de rayos gamma a partir del año 2025, se anunció oficialmente este miércoles.
La construcción será posible tras la firma de un acuerdo entre la Cancillería chilena y el Observatorio Europeo Austral (ESO) para la instalación del Observatorio Cherenkov Telescope Array (CTA) en el cerro Paranal, en pleno desierto de Atacama, que ya alberga al Very Large Telescope (VLT), el observatorio astronómico de luz visible más avanzado del mundo.
EL CTA considera la instalación de 99 telescopios en el observatorio Paranal, que serán complementados con otros 19 que estarán en el hemisferio norte. Se espera que la construcción de todos los telescopios finalice en 2025.
“De esta manera, Chile albergará la mayor concentración de tecnología para la observación de fenómenos desde la Tierra”, señaló el director ejecutivo de la Comisión Nacional de Investigación Científica y Tecnológica (Conicyt), Christian Nicolai.
En el país también se encuentra el radiotelescopio Alma, que con 66 antenas es considerado el más potente de su tipo en el mundo, mientras que para 2021 entrará en operaciones el Telescopio Gigante de Magallanes, que tendrá una capacidad de producir imágenes 10 veces más nítidas que el telescopio espacial Hubble.
Se espera que el nuevo telescopio de rayos gamma de Chile tenga una precisión sin precedentes, 10 veces más sensible que los telescopios existentes, según explicó Federico Ferrini, director gerente de CTA.
Aunque la atmósfera de la Tierra evita que los rayos gamma lleguen a la superficie, los espejos y las cámaras de alta velocidad de CTA capturarán los rápidos destellos azulados de la radiación Cherenkov -que recibe su nombre del físico ruso Pável Cherenkov- y que se produce cuando éstos interactúan con la atmósfera.
“El alcance científico de CTA es extremadamente amplio: desde la comprensión del papel que juegan de las partículas cósmicas relativistas, hasta la búsqueda de la elusiva materia oscura”,explica un comunicado de prensa de Conicyt.
“CTA explorará el Universo extremo, indagando diferentes entornos, desde la vecindad de agujeros negros hasta el vacío cósmico a las escalas más grandes. Esto podría incluso llevar a una física completamente nueva a medida que se estudia la naturaleza de la materia y las fuerzas más allá del Modelo Estándar”.