Detrás de un video que se popularizó esta semana en internet, está el drama que viven los colonenses. En Segundos visitó a Rodolfo Miller Morgan, su familia y su barrio
En el caserón 12085, conocido como La Esmeralda y ubicado en la calle 12 y Meléndez de la ciudad de Colón, aún se siente el olor a humo.
Se camina a tientas sobre los restos de las pertenencias de las familias que residían en los cinco cuartos que se quemaron y quienes ahora quedaron en la calle.
Cerca de las 2:00 a.m. del jueves 12 de enero, “Pipe”, uno de los vecinos cumplió su amenaza de quemar la casa.
Uno de los que quedó sin nada, es Rodolfo Miller Morgan. Un niño de solo 8 años de edad que vive con su madre y cuatro hermanos y que acaparó las redes sociales en Panamá.
El dominio y espontaneidad que tiene para expresarse provocó múltiples comentarios, tras divulgarse las respuestas que dio a periodistas pasado el incendio. Lo que más asombró a cuantos vieron el video es la noción que tiene del entorno. No quiere vivir entre violencia e impunidad.
“Quemó mi casa, quemó la casa de arriba (…) mis pantalones se me quemaron, mis zapatillas nuevas se me quemó. ¿Quién me la va a comprar?” relató su realidad, desesperado.
Sus palabras y cuestionamiento al presidente Juan Carlos Varela, por la condición de la ciudad, revolucionaron las redes.
Detrás del video hay un niño tierno. Basta escucharlo unos minutos para comprender su real preocupación por la tierra que lo vio nacer, por sus familiares y vecinos.
Este año asistirá al cuarto grado en la escuela República de Bolivia, es un apasionado por el fútbol y siempre está por el barrio socializando.
Su mamá, Sebastiana Morgan, una mujer trabajadora de 35 años de edad, dice que a Rodolfo le gusta ayudar a su abuelo, va al mercado, en ocasiones vende panela y siempre está activo como todo niño a su edad. Y asegura que las expresiones del niño son naturales, “yo no le digo nada de eso”.
Su abuelo, Moisés Morgan, dice que la palabra es un don que Dios le concedió a Rodolfo. Después del video ha recibido muestras de apoyo, aunque al igual que las otras familias no tiene donde dormir y claman por la pronta atención de las autoridades.
En el patio donde juega y corretea con sus hermanos y vecinos, ha tenido que dormir sobre cartón, contó su madre entre lágrimas.
A sus 8 años ya sabe qué quiere hacer en el futuro y lo reitera con propiedad: “Si no voy a ser guardia, voy a ser presidente. No va a haber pistola, balacera…”, aseguró.
Su pasión y ganas de hacer la diferencia es tan grande que según cuenta su mamá fue él quien pidió, directamente, al jefe de la Policía Nacional en Colón, el comisionado Carlos Rumbo que, quería llevar el atuendo de policía. Y aquel uniforme es el que cuenta en el video, que es lo único que rescató además de un pantalón.
Cumplió este sueño en las fiestas patrias del 3 y 5 de noviembre, cuando lució el uniforme de teniente de la Policía.
En la provincia de Colón, con 241,928 habitantes, según el último censo de población de 2010, el gobierno invierte $569 millones en una renovación debido al déficit habitacional. El proyecto cuenta con un 27.02% de avance y durante el desarrollo de esta obra, la pobreza, la deserción escolar, el desempleo e inseguridad siguen golpeando a la provincia. Solo en 2017 se registran dos homicidios.