Cinco conductoras de televisión estadounidenses de entre 40 y 61 años presentaron el miércoles una demanda contra el canal local New York 1, donde denuncian que son discriminadas en favor de periodistas hombres o de mujeres más jóvenes.
En la presentación de 61 páginas, las periodistas, que poseen una antigüedad de 11 a 27 años en el canal NY1, estiman haber sido “marginadas de manera flagrante” por Charter Communications, el operador de cable que compró el canal de información local neoyorquina en 2016.
Aseguran que desde que Charter Communications compró NY1 su “presencia al aire fue sustancialmente reducida” y les “retiraron de misiones de reportaje de alta visibilidad”, privilegiando a “muchas mujeres más jóvenes y hombres con mucho menos experiencia”.
Aseguran haberse quejado ante la dirección -de gran mayoría masculina- y ante recursos humanos, que les respondió con “desprecio” o “simplemente ignoró” antes de discriminarlas aún más en represalia.
Las cinco mujeres, con una reconocida trayectoria profesional, reclaman indemnizaciones por daños y perjuicios por un monto no precisado.
New York 1 fue fundada en 1992. La demandante de más edad, Roma Torre, de 61 años, trabaja en el canal desde su primer día y es uno de los rostros mas conocidos de la cadena.
Torre recibió varios premios, incluido este año un Emmy, la recompensa de la televisión estadounidense, por sus críticas teatrales, el único Emmy ganado por el canal.
Si bien sigue presentando las noticias, asegura que sus horas de presentación durante el día, las más codiciadas, le fueron reducidas progresivamente desde 2017 en beneficio de un hombre y de una mujer más joven.
Charter Communications, compañía que cotiza en bolsa, niega las acusaciones y dijo a la prensa que “más de la mitad de las personalidades que aparecen al aire son mujeres, y más de la mitad (de esas mujeres) tienen más de 40 años”.
En un comunicado, el canal aseguró que Torre seguía presentando un informativo al mediodía, “lo que subraya su importancia y prominencia en NY1”, aunque reconoció que la presentadora tenía menos presencia en la tarde.
Charter Communications afirmó haber tomado las acusaciones de las cinco mujeres “en serio” pero, después de una “revisión exhaustiva”, “no las encontró justificadas”.
En una carta abierta difundida el miércoles, las cinco mujeres insistieron en que esta discriminación “no era un fenómeno nuevo” y que no eran las únicas víctimas.
Las denunciantes lanzaron una campaña en redes sociales bajo el lema #BroadcastWomen, para “luchar por todas las mujeres que han alcanzado cierta edad y han sido marginadas intencionalmente”.
Un antecedente data de 2016, cuando la asociación nacional de anunciantes presentó una campaña con el lema #SeeHer (“Verla”) con el objetivo de alcanzar una representación de las mujeres en los medios y la publicidad más acorde con la realidad.