El reporte regular del Departamento de Estado de los Estados Unidos sobre el clima de inversión país por país ha tenido eco en los medios de comunicación en Panamá como siempre sobredimensionando lo negativo y desestimando lo positivo.
A grandes rasgos hay tres temas importantes que destaca el informe sobre Panamá.
El primero es sobre corrupción como el reto más grande de Panamá. Y se alega según el informe por los inversionistas estadounidenses que es una “corrupción rampante” tanto en el sector público como privado.
Esto es una exagerada apreciación de la realidad panameña donde la facilidad para abrir empresas es loable y la transparencia de la información disponible sobre los pasos a seguir materia localizable en las redes.
Corrupción hay en todas partes. Inclusive en los Estados Unidos. Y con todas estas medidas de retribución económica contra empresas y personas naturales extranjeras que imponen hoy los Estados Unidos escapan de la incertidumbre de si es un lugar seguro para la inversión. Cualquier inversionista pondría sus barbas en remojos y distanciaría parte de su haber patrimonial hacia otras jurisdicciones lejanas a los Estados Unidos o su moneda.
¿Y cómo se concilia esta afirmación de corrupción rampante a la vez de ser el país con mayor inversión extranjera directa en Centroamérica?
Muchos “supuestos inversionistas estadounidenses” se quejan por el proceso de titulación de tierras en Panamá. Empecemos por analizar este tema. La exuberancia tropical y las hermosas playas panameñas han motivado a muchos especuladores e inversionistas extranjeros a comprar derechos posesorios sobre riberas de playas e islas. No realizan una debida diligencia sobre la validez de dichos derechos posesorios o las limitaciones establecidas por la ley. Compran en forma desesperada y luego se encuentran con litigios, traslapes y limitaciones que no pueden resolver. Exponen sus inversiones por desconocer las leyes nacionales y luego critican el sistema y el clima de inversión. Estos casos no son de personas interesadas en invertir sino más bien de apropiarse de extensiones territoriales para especular. Muchas veces terminan embaucando a otros con proyectos imaginarios sobre áreas sin ningún tipo de infraestructura.
Se hace necesario limitar la posibilidad de titular islas a extranjeros o riberas de playas como otros países lo han hecho. Inclusive restringir la propiedad sobre grandes extensiones territoriales a extranjeros si carecen de un proyecto viable de desarrollo sostenible.
El otro tema es la falta de transparencia en las licitaciones públicas. Es un hecho la necesidad de reformar la ley de contrataciones públicas y garantizar altos niveles de transparencia. Pero la pregunta es: ¿Cuántas empresas estadounidenses licitan en Panamá? Nos ahogan las empresas españolas y de la región latinoamericana (México, Costa Rica, Colombia y Brasil). No son mejores ni peores, sin embargo, han acaparado casi la totalidad de las obras de infraestructuras desarrolladas en Panamá. La pregunta sería porque no la pueden hacer las constructoras panameñas. Por qué deben venir de otras latitudes cuando tenemos la capacidad para realizar estas obras. Y no hablo de obras complejas como El Metro, La expansión del Canal o hidroeléctricas y generadores de electricidad. Me refiero a escuelas, hospitales, carreteras, acueductos y alcantarillados, soterramiento de cables, aceras. No hay razón alguna.
El clima de inversiones en Panamá es óptimo. Es perfectible, pero es años luz superior a todos nuestros vecinos desde México hasta Argentina. A tal punto que muchos creen aquí lo que llega es dinero sucio y por eso crecemos. Se equivocan. Es nuestra posición geográfica, es nuestra firme convicción que nuestro futuro está integrado al mundo y por eso nuestra economía es abierta. Es nuestra capacidad de aprender de otros y convivir con ellos. No hay mejor país para invertir en Latinoamérica. Otros tendrán mercados más grandes (Brasil, México, Colombia) pero son extremadamente burocráticos y hasta nacionalistas. A los extranjeros le hacen la vida difícil sin querer queriendo. ¿Nuestros problemas? Quien no los tienes. No son de tipo racial, religioso, étnico. Ni la desigualdad económica de la que se pregona producto de una situación general del país. Somos desiguales por razón de economías paralelas en distinta áreas geográficas que la acentúa la zona de tránsito donde ganarse un dólar es más fácil que en el resto del país.
Mal de muchos, consuelo de tontos?
Totalmente de acuerdo y seguimos con muy poca capacidad de reacción para acabar con la noticia, y los medios y quienes hacen opinión prefieren seguir en modo negativo,
Me parece que Usted desconoce lo que verdaderamente pasa en Panamá con los Derechos Posesorios.
Lo invito a que investigue lo que por ejemplo pasó en la Costa Arriba de Colón, en Viento Frío.
Un grupo de jubilados estadounidenses jubilados , quienes habían comprado terrenos sobre el cual
habían construido sus casas fueron víctimas de un pseudo cocotudo, es decir maleante con contactos
que demolió sus propiedades, un hotel y unas cabañas de otro inversionista para robarles sus tierras, ahí no
se trataba de especulación. Lo invito a que vea como aún sobre la costa quedan los escombros de las casas
El caso en manos de una ANATI corrupta, que no envía la información solicitada a las fiscalías entre otras cosas.
Le recuero que hasta hace poco , la mayoría de las tierras en el interior del país no estaban tituladas.
La ANATI se creó para robar más fácil. Antes se debía pedir VB de la contaloría entre otras cosas. Usted está
equivocado investigue antes de referirse al tema. Familia enteras perdieron sus ahorros invirtiéndolos en el supuesto Paraíso
para retirárse.
Agrego, que muchos de los traslapes nacen dentro de la misma institución. Normalmente
antes de titular un terreno se va al campo y se verifican las coordenadas. Si hay traslape debe resolverse antes de titular.
Sino se resuelve hasta ahí debe llegar el proceso en la ANATI.
Usted no sabe lo que pasa en Panamá con extranjeros que compran terreno.
Un amigo mío, James Norris, compró terreno hace anos. El hizo todo de acuerdo a las leyes de Panama. El registró las compras y consiguió todos los estudios ambientales, y pagó todos los permisos. Construyó un resort de buceo y pesca en la Costa Arriba de Colón, en Viento Frío. El dió trabajo a muchos personas, pagando sueldo y seguirdad social. El no era especulador. El quiso crear un sitio de turismo, creyendo que en Panama existe Seguridad Juridica.
Un gurpo de nosotros, tambien estadaunidenses, compramos terreno al lado de el por jubilarnos allí. Construimos casa, y mejoramos los lotes, y pasamos mucho tiempo allí.
Hace unos 6 años, un Panameño (puedo darle el nombre si le interesa), decidió que el deseaba todo este terreno. El intentó primero comprarlo por poco dinero. Cuando James no quiso vender, este hombro lo robó. El invento algun pretexto, pagó a jueces y policia, y tomaron preso al Sr. Norris, sin ningun acto de ley. Nosotros, los amigos, pasamos tres años en quitarle de la prisión. Pro fin, le deportó. Esta ahora sin su terreno, sin su resort, y sin su inversión.
Mientras el Sr. Norris estuvo preso, este senor entró la propreidad, robó las casas y las demolió. Demolió todas las casas, un hotel, cinco cabanas en la playa, un restaurante, y todos los edificios del resort. Y los escombros, el los empujó en el mar, danando el arecife.
Nuestra abogada ha presenatdo a ANATI varias veces todos los papeles necesarios para probar quien es dueno del terreno. ANATI los ha perdido various veces. Y ANATI, lo corrupto que es, no hace nada.
Lo que hemos aprendido es que el país de Panama es bien corrupto y todos pretenden que todo está bien. Ustedes deben hacer un studio de la situation.
Deben saber la verdad antes de decir que todo está bien,
La corrupcion en panama es innegable y ha permeado a toda la sociedad sin excepciones….
Nuestra clase política. Empresarial economica se ha encargado de diseminarla.
Si no afrontamos esta realidad y continuamos negandola seguiremos en listas negras… Grises y de todos los colores.
No hay peor ciego que el que no quiere ver.