Al ritmo de merengues y cumbias interpretadas por un conjunto musical, el baile de disfraces recorrió las estrechas y empedradas calles del poblado maya-kaqchikel, situado 18 km al oeste de la capital guatemalteca
Disfrazados de Batman, Superman y otros personajes del cine y la televisión, decenas de artistas salieron a bailar el viernes a las calles del pueblo indígena de Sumpango, en el oeste de Guatemala, para despedir el 2016.
Al ritmo de merengues y cumbias interpretadas por un conjunto musical, el baile de disfraces recorrió las estrechas y empedradas calles del poblado maya-kaqchikel, situado 18 km al oeste de la capital guatemalteca.
“El convite es la celebración de las fiestas de fin de año para darle alegría y esperar el año venidero”, dijo a la AFP Antonio Navas, de 33 años, presidente del club Saturno, creado por jóvenes artistas de la localidad en 1980.
La danza se extiende por unas 12 horas y durante el recorrido, vecinos y turistas detienen la marcha para hacerse fotografías con los bailarines que emulan personajes de series animadas y figuras de acción.
Del disfraz sobresale la cabeza, confeccionada con fibra de vidrio, pasta plástica, pintura y otros materiales, y cuya técnica se ha ido perfeccionado durante los últimos 36 años.
“Tratamos de inculcar la tradición a los más pequeños y tratamos de que los hijos sigan la tradición y que no muera”, agregó Navas, un empresario del transporte de pasajeros de Sumpango.
Dentro del grupo hay hombres y mujeres de 10 a 46 años, muchos de ellos descendientes de la primera generación de artistas.
El festejo “prácticamente es parte de mi vida”, dijo a la AFP Darío Chiquitó, de 29 años, quien desde niño participa en el baile.
“Me lo inculcaron mis padres y mis hermanos. Si yo en algún momento no puedo salir (bailando), para mí es triste”, añadió Chiquitó, ataviado con un disfraz del cerdo Porky, antes de arrancar la comparsa.