La iniciativa sobre la destrucción de armas químicas abandonadas fue acogida y avalada por la OPAQ. Se estableció un periodo tope de 2 meses para ser ejecutada la operación entre septiembre y noviembre
El plan presentado por la República de Panamá para la destrucción de las ocho (8) municiones químicas abandonadas, ubicadas en la Isla San José, fue respaldado por los países miembros del Consejo Ejecutivo de la Organización para la Prohibición de Armas Químicas (OPAQ), informó la Cancillería de República, mediante un comunicado.
El comunicado destaca que la citada destrucción de las armas químicas es el resultado de un histórico acuerdo de cooperación entre la República de Panamá y los Estados Unidos de América, con base en el párrafo 12 del artículo IV de la Convención sobre la Prohibición del Desarrollo, la Producción, el Almacenamiento y el Empleo de Armas Químicas y sobre su Destrucción.
El acuerdo bilateral incluye el financiamiento y la ejecución de la operación por parte del país norteamericano. Además, la operación está sujeta al monitoreo y verificación de la OPAQ, aclara la nota.
La operación se llevará a cabo en el último cuatrimestre del 2017. Durará entre seis y ocho semanas y se realizará entre los meses de septiembre y noviembre.Dichas municiones fueron detectadas en el año 2002, durante una inspección técnica de la OPAQ
la Cancillería explica que en la operación participará un grupo de especialistas norteamericanos, junto a personal de la Unidad Técnica de Explosivos de la Policía Nacional, que serán capacitados para participar en el proceso de destrucción y verificación, lo que permitirá que en Panamá quede instalada una capacidad humana y técnica para este tipo de contingencias.
El plan de destrucción de las municiones químicas y su posterior verificación fue presentado ante el 85° Consejo Ejecutivo de la OPAQ, por el Representante de Panamá ante La Haya, Países Bajos, Willys Delvalle, y tuvo el reconocimiento público de Argentina, Chile, México y Guatemala.