El fiscal de Ecuador, Carlos Baca, pidió este jueves la pena máxima de seis años de cárcel por el delito de asociación ilícita para el vicepresidente Jorge Glas, juzgado en el caso de los millonarios sobornos de la constructora brasileña Odebrecht
“Después de justificar con pruebas la participación del Vicepresidente en el delito de asociación ilícita en calidad de autor, el Fiscal General #CarlosBacaM solicitó la imposición de la pena máxima prevista en el Código Penal”, de seis años, informó el ente acusador en twitter.
Baca hizo el pedido al presentar los alegatos finales en el juicio que se sigue desde el 24 de noviembre en la Corte Nacional de Justicia contra Glas y otras ocho personas procesadas, entre ellas su tío Ricardo Rivera, e instó al juez a que dicte sentencia.
Según explicaron fuentes de la Fiscalía a la AFP, la fase de alegatos de cierre podría finalizar este jueves o viernes, y que el juez podría dictar sentencia la semana que viene, tras varios días de deliberación.
La Fiscalía acusa a Glas, durante años responsable de sectores estratégicos, de haber recibido a través de su tío unos 13,5 millones de dólares en sobornos por cinco contratos adjudicados a Odebrecht, que habría repartido en Ecuador alrededor de 47,3 millones de dólares por ese concepto.
El vicepresidente, en prisión preventiva desde el pasado 2 de octubre y al que el mandatario Lenín Moreno retiró sus funciones en agosto, es el político en activo de mayor rango en ser procesado por este mega-caso que ha sacudido los círculos del poder y la política en América Latina y África.
La prisión preventiva y el proceso contra el vicepresidente tiene como telón de fondo la fractura en el seno del movimiento oficialista en el poder en Ecuador desde 2007, entre los partidarios de Moreno y los del exmandatario Rafael Correa, estrecho aliado de Glas.
En su reciente visita a Ecuador, Correa visitó a Glas en la corte y volvió a defender su inocencia.
El exmandatario y Glas sostienen que Moreno se ha aliado con la oposición tradicional y se sirve de la lucha contra la corrupción para desprestigiar a su gobierno e inhabilitarle a él.
La Fiscalía, que se abstuvo de acusar del mismo cargo al delator y exdirector de Odebrecht en Ecuador, advierte desde hace semanas que Glas y otros involucrados podrían ser acusados de más delitos como cohecho y enriquecimiento ilícito, con penas mucho mucho más severas.