Al menos 10 personas resultaron heridas este miércoles en la explosión de un artefacto artesanal en un supermercado de San Petersburgo (noroeste), anunció la policía de la segunda ciudad de Rusia
“Una detonación tuvo lugar hacia las 18H30 (15H30 GMT) en un supermercado en la avenida Kondratiev en San Petersburgo”, dice el comunicado.
Según las primeras informaciones, hay varios heridos”, había indicado la policía en el breve comunicado. “Las circunstancias del incidente están actualmente siendo estudiadas”, añadió.
“Diez personas fueron hospitalizadas, su vida no está amenazada”, precisó un responsable del Comité de Investigación local, Alexandre Klaus, citado por las agencias TASS e Interfax.
Entre las personas hospitalizadas, una está herida de gravedad, indicó a la AFP una fuente de los servicios de auxilio.
En otro comunicado, el Comité de Investigación anunció la apertura de una investigación por “tentativa de homicidio”.
“Un artefacto explosivo artesanal de una potencia equivalente a 200 gramos de TNT lleno de fragmentos letales detonó” en el establecimiento, dijo la portavoz del Comité de Investigación, Svetlana Petrenko, citada por agencias rusas, quien indicó que se estudian “todas las hipótesis”.
Las autoridades indicaron no descartar ninguna pista, sin abrir por ahora formalmente un procedimiento por ataque terrorista.
San Petersburgo sufrió un atentado en el metro que provocó 16 muertos y decenas de heridos el pasado 3 de abril, y que fue reivindicado por un grupo poco conocido vinculado a la red Al Qaida.
A mediados de diciembre, los servicios de seguridad rusos anunciaron haber desmantelado una célula del grupo yihadista Estado Islámico (EI) que se disponía a cometer atentados el día 16 en San Petersburgo, concretamente en la turística catedral de Nuestra Señora de Kazán.
El presidente ruso, Vladimir Putin, llamó entonces a su homólogo estadounidense, Donald Trump, para “agradecerle” las informaciones transmitidas por la CIA, que permitieron desbaratar los ataques.
Rusia fue amenazada en varias ocasiones por el grupo EI y por la rama siria de Al Qaida desde el inicio de su intervención militar en Siria, el 30 de septiembre de 2015.
Después de que Putin anunciara, a mediados de diciembre, una retirada parcial de las tropas rusas de Siria, los servicios de seguridad dijeron temer una llegada de yihadistas desde el país en guerra.