El expresidente peruano fue ingresado a una clínica, horas después de que la Corte Suprema anulara el indulto humanitario que consiguió en diciembre.
Acompañado por su hijo menor, Kenji Fujimori, el expresidente de 80 años fue trasladado en ambulancia hasta la Clínica Centenario Peruano Japonesa, en la que había estado internado varias veces antes por problemas de salud.
“Como hijo de Alberto Fujimori es mi deber humano estar con él en sus momentos más difíciles. Hoy nuevamente estoy contigo en una ambulancia, te amo y si tengo que dar mi vida y hasta mi libertad por ti, así lo haré. Siento mucho dolor”, tuiteó Kenji.
Pasada las nueve y media de la noche de este miércoles, su abogado Miguel Pérez Arroyo informó en CNN que su cliente “está grave y que, de ser reingresado a la cárcel puede morir”.
La Corte anuló el indulto humanitario y ordenó la captura de Fujimori, libre desde diciembre tras un polémico indulto del entonces mandatario Pedro Pablo Kuczynski.
La ambulancia con Fujimori ingresó hacia las 16h45 locales (21h45 GMT) a la clínica, donde lo aguardaban numerosos periodistas.
Poco antes, el abogado Pérez, presentó dos apelaciones, una para impugnar la anulación del indulto y la otra para pedir que su cliente permanezca en libertad mientras la justicia analiza su primer recurso