“Siento que debo emitir una declaración adicional para corregir la falsa impresión generada por mi disculpa”, dijo el tenor de 79 años en un comunicado.
El tenor español Plácido Domingo anunció este jueves que renuncia a cantar en el Teatro Real de Madrid y en otros escenarios, molestos por las acusaciones de acoso sexual vertidas contra el cantante, quien matizó que sus excusas presentadas el martes dieron una “falsa impresión”.
“Siento que debo emitir una declaración adicional para corregir la falsa impresión generada por mi disculpa”, dijo el tenor de 79 años en un comunicado.
En el mismo, anunció que se retira de las representaciones de ‘La Traviata’ previstas en mayo en el Teatro Real de Madrid, “para evitarles que mi situación pueda afectar, perjudicar o causar cualquier inconveniente adicional”.
“Además, me retiraré de la representaciones en los teatros y las compañías que tengan dificultades en llevar a cabo esos compromisos”, añadió.
Por lo demás, y si no se plantean estos problemas, “cumpliré todos mis otros compromisos donde las circunstancias lo permitan”, puntualizó el artista.
Las futuras cancelaciones se producirán potencialmente en varios países, ya que el cantante, ganador de 12 premios Grammy, tenía agendadas numerosas funciones en los próximos meses en España, Austria, Rusia, Suiza, Alemania o Italia.
De momento, la Ópera de Viena y el Festival de Salzburgo, donde tiene programas previstos en junio y agosto respectivamente, anunciaron que estudiarán su participación, a la luz de los últimos acontecimientos.
– Una cascada de cancelaciones –
El anuncio de este jueves se suma a otras anulaciones en España, un país en el que su figura había seguido siendo totémica, y donde actuó últimamente.
Horas antes, el festival de música y danza de Úbeda, en el sur de España, canceló un concierto de Domingo previsto para el 3 de mayo.
Y el miércoles, ante “la gravedad de los hechos” y “en solidaridad con las mujeres afectadas”, un organismo cultural del gobierno español suspendió la participación de Domingo en el Teatro de la Zarzuela de Madrid, donde el tenor debía celebrar sus 50 años de carrera.
Desde agosto, el artista se encuentra inmerso en el escándalo, después de que una veintena de mujeres lo acusaran de manosearlas, besarlas a la fuerza o chantajearlas, en incidentes que en algunos casos se remontan a hace 30 años.
Inicialmente, Domingo lo rechazó categóricamente, pero el martes dio la sorpresa al emitir un comunicado en el que dijo sentir “el sufrimiento” causado a esas mujeres, y aseguró asumir “toda la responsabilidad de [sus] acciones”.
Su comunicado inicial fue publicado horas antes de que la asociación estadounidense de músicos AGMA revelara que según su investigación interna, el cantante tuvo “una conducta inapropiada”, y “muchos de los testigos expresaron temor a represalias profesionales como razón para no hablar antes”.
En su comunicado este jueves, el artista se defendió, aseverando que sus excusas dieron una “falsa impresión”.
“Mi disculpa fue sincera y de todo corazón”, y “nunca ha sido mi intención lastimar u ofender a nadie”, aseveró.
“Sé lo que no he hecho y lo negaré nuevamente. Nunca me he comportado agresivamente con nadie, y jamás he hecho nada para obstruir o perjudicar la carrera de nadie”, dijo el tenor.
Domingo insistió diciendo que ha “dedicado gran parte de [su] medio siglo en el mundo de la ópera a apoyar la industria y promover la carrera de un sinnúmero de cantantes”.
Ya en octubre, y ante el escándalo generado, el tenor tuvo que renunciar a la la dirección de la Ópera de Los Ángeles, que desempeñaba desde 2003, y vio cómo le cancelaban actuaciones en otras ciudades de Estados Unidos.