Avigan se administrará durante un máximo de 14 días a pacientes de 20 a 74 años, todos ellos en estado leve de neumonía viral.
El grupo japonés Fujifilm comenzó un ensayo clínico para probar la eficacia de su medicamento antigripal Avigan (favipiravir) para tratar pacientes afectados por el nuevo coronavirus, tras resultados alentadores de otros estudios realizados en China con ese producto.
“El ensayo se realizará en 100 pacientes de aquí a fines de junio” en Tokio, precisó este miércoles a la AFP un portavoz de Fujifilm, conocido por su productos de oficina y fotografía, aunque también está presente en el sector médico.
“Recopilaremos los datos, los analizaremos y solicitaremos su aprobación” después si este ensayo clínico de fase III resulta exitoso, agregó.
Avigan se administrará durante un máximo de 14 días a pacientes de 20 a 74 años, todos ellos en estado leve de neumonía viral. Las mujeres embarazadas quedarán excluidas del estudio debido al riesgo de efectos secundarios.
Esta iniciativa se produce después de que el primer ministro japonés, Shinzo Abe, declarara el fin de semana pasado que su gobierno iba a iniciar los procedimientos reglamentarios para obtener la aprobación de Avigan para tratar el nuevo coronavirus.
Las autoridades chinas, que ya realizaron ensayos clínicos con favipiravir, el principio activo de ese medicamento, anunciaron resultados alentadores el mes pasado.
Según Pekín, el favipirarvir permitió reducir el tiempo de curación de pacientes con coronavirus. Fujifilm no participó, sin embargo, en esos estudios clínicos chinos.
Avigan, que forma parte de la familia de medicamentos antivirales, tiene permiso de venta y producción desde 2014 en Japón para ser usado contra la gripe.
No obstante, su uso es restringido como último recurso si otros tratamientos antivirales no son suficientemente eficaces contra virus gripales nuevos o resurgentes.
Avigan no está entonces disponible en farmacia o en los hospitales, tanto en Japón como en el extranjero, precisó Fujifilm.
Investigadores y grupos farmacéuticos de todo el mundo realizan una carrera contrarreloj para encontrar un remedio eficaz contra la enfermedad COVID-19, tanto en forma de tratamiento como de vacuna.
Las esperanzas más inmediatas están en medicamentos ya aprobados para otras enfermedades, como los antivirales contra el sida y los antipalúdicos como la hidroxicloroquina y la cloroquina.
Los estudios clínicos realizados en Francia y en China sobre estos antipalúdicos suscitaron muchas esperanzas, pero también muchas dudas de la comunidad científica.