Las discotecas y bares de noche, sin embargo, seguirán cerrados en todo el territorio y la movilidad interregional e internacional todavía estará sometida a importantes restricciones.
España seguirá el lunes con su cauteloso desconfinamiento por fases con el pase de Madrid y Barcelona a la segunda y penúltima etapa que autoriza la apertura de playas para el baño recreativo o del interior de restaurantes, indicó este viernes el gobierno.
Por su parte, más de la mitad de la población española, residente en regiones menos afectadas por la pandemia, entrará en la última fase del proceso que permite la realización de casi todas las actividades en ciertas condiciones de higiene y seguridad.
Las discotecas y bares de noche, sin embargo, seguirán cerrados en todo el territorio y la movilidad interregional e internacional todavía estará sometida a importantes restricciones.o me
En la región de Madrid y el área metropolitana de Barcelona, las más afectadas por la pandemia que dejó más de 27.000 fallecidos en el país, la fase dos permitirá la reapertura de todos los comercios (hasta ahora solo podían los pequeños), pero a un 40% de aforo.
En las playas de Barcelona, la gente podrá bañarse y tomar el sol cuando por el momento solo se podía pasear, correr o practicar natación. El ayuntamiento anunció la instalación de cámaras y sensores para controlar la ocupación de las playas.
Además, los bares y restaurantes podrán acoger clientes en su interior con un aforo limitado, y no solo en la terraza como hasta ahora. También se autorizarán las visitas a geriátricos o la celebración de bodas en pequeño formato.
El número máximo de personas en una reunión pasará de diez a quince en la fase 2.
Importantes regiones del país que iniciaron antes el desconfinamiento, como Andalucía, Galicia, País Vasco o los archipiélagos de Baleares y Canarias, iniciarán el lunes la última fase, que permite las reuniones de hasta 20 personas o bodas con muchos más invitados.
Esta desescalada de las severas restricciones impuestas el 14 de marzo para frenar la pandemia debe terminar entre finales de junio y principios de julio, dependiendo de la región.
El estado de alerta que permitió al gobierno aprobar este confinamiento se prorrogó el miércoles por última vez hasta el 21 de junio.
El gobierno español prepara un decreto con algunas medidas de seguridad e higiene que deberán mantenerse para evitar rebrotes cuando el país alcance lo que llaman la “nueva normalidad”.
Segundo destino mundial para los turistas, el país abrirá sus fronteras a los extranjeros el 1 de julio.