El programa promueve el Fortalecimiento y participación de la familias como protagonistas de su desarrollo.
Con una inversión de 389 mil dólares el Ministerio de Desarrollo Social (MIDES) y el Banco Mundial, como parte del Proyecto de fortalecimiento del Sistema de Protección social, han puesto en marcha un plan piloto que promoverá el fortalecimiento de capacidades colectivas, la participación ciudadana a través del crecimiento de granjas autosostenibles que permitirá que 800 familias sean capaces de producir sus propios alimentos y de vender el excedente de sus cosechas, fortalecer el trabajo comunitario, la articulación de las demandas locales y la oferta institucional unificada.
El programa fue inaugurado hoy por la ministra del MIDES, María Inés Castillo y la viceministra, Milagros Ramos Castro quienes asistieron a una granja avícola y agrícola ubicada en el corregimiento de Las Lajas, distrito de San Félix en Chiriquí.
La ministra se reunió con las 13 mujeres que liderizan el proyecto que está adscrito al programa de Redes Territoriales y les explicó todos los beneficios que le ofrecerá este programa y cómo potenciará sus proyectos.
La titular de la cartera social explicó que el programa beneficiará a cinco provincias: Chiriquí con 5 proyectos, Veraguas con 32, Coclé con 30 y los Santos y Herrera con 10 proyectos.
Este plan piloto impactará directamente a 800 familias donde viven aproximadamente 4 mil personas en pobreza extrema de acuerdo a las proyecciones que se han realizado.
La ministra también explicó que el programa les proveerá de todo lo necesario. En el caso de las granjas agrícolas las beneficiarias recibirán 15 diferentes clases de semillas, herramientas, bombas de agua y asesoramiento técnico para desarrollar una producción autosostenible.
A los que desarrollan granjas avícolas se les entregará vitaminas, alambre, 100 pollos de engorde y asesoramiento para impulsar un crecimiento sano que les permita tener a las 7 u 8 semanas pollos para el consumo y comercialización.
Para la ministra María Inés Castillo, este proyecto empodera a la mujer rural y les permite generar ingresos económicos que les ayuda a sustentar sus hogares. La faculta además de liderazgo, una cualidad que es fundamental para el desarrollo de la paridad de género.
Este programa también combate la pobreza, la deserción escolar y se alinea con los Objetivos de Desarrollo Sostenibles (ODS) que busca un desarrollo social justo y equitativo en todas las clases sociales sin excepción.
“Estamos otorgándoles herramientas financieras y capital semilla que les ayudará a ser mujeres emprendedoras capaces de generar una economía en sus comunidades”, indicó la ministra.
María Inés Castillo al referirse a las beneficiarias detalló que la mayoría son beneficiarias de los programas de transferencias monetarias condicionadas (PTMC), mujeres rurales que requiere ser incluidas en el desarrollo social del país. No basta con entregarle una transferencia, también es necesario enseñarles a ser actoras de su propio desarrollo.
¿Pero cómo se consigue que un grupo de mujeres empíricas en la agricultura y en proyectos avícolas sean capaces de ser autosostenibles?
La Directora de Inversión para el Desarrollo del Capital Social, Onelia Peralta Núñez indicó que esto se logra a través de un plan humano o habilidades blandas que incluyen un acompañamiento permanente, capacitaciones y asesoramiento en campo.
Aquí se le enseña técnicas de siembra como la aplicación de camas para cultivar rubros como: repollo, habichuelas, ají, apio, lechuga, tomate, pepino y otros cultivos esenciales para el consumo humano.
Pero este proyecto también tiene un componente social, a través de los grupos organizados se realizan diagnósticos comunitarios que permiten a las autoridades realizar una radiografía social de la comunidad.
Otras de las bondades del programa es su articulación interinstitucional. Aquí colaboran el Ministerio de Desarrollo Agropecuario (MIDA), Instituto de Mercadeo Agropecuario (IMA), La Autoridad de la Micro, Pequeña y Mediana Empresa (AMPYME) e Instituto Nacional de Formación Profesional y Capacitación para el Desarrollo Humano (INADEH) quienes le facilitarán a las beneficiarias herramientas financieras, cursos y recursos para desarrollar líneas de producción sostenibles.