Un volumen de hielo estimado en 500.000 metros cúbicos amenazaba con desprenderse, según las autoridades locales.
La comuna de Courmayeur, en los Alpes italianos, anunció este domingo “el levantamiento de todas las medidas” de seguridad impuestas para hacer frente al riesgo de desprendimiento de un enorme bloque del glaciar Planpincieux, donde la situación volvió a la normalidad.
Las últimas informaciones recogidas en el glaciar “confirmaron un retorno a los parámetros habituales de riesgo”, el cierre del valle de Val Ferret (abajo del glaciar), que había sido ordenado el miércoles pasado, fue levantado, anunció el ayuntamiento en un comunicado.
El tráfico de automóviles en el pequeño valle fue nuevamente autorizado, en tanto los quince residentes evacuados regresaron a sus casas.
Un volumen de hielo estimado en 500.000 metros cúbicos (“el tamaño de la catedral de Milán”) amenazaba con desprenderse, según las autoridades locales, que ordenaron el miércoles por la noche la evacuación durante 72 horas de una “zona roja” de centenares de metros de ancho situada más abajo, en una parte del valle poco habitada y sobre todo frecuentada por excursionistas durante la temporada estival.
En el Valle de Aosta, el pequeño Val Ferret, que en el verano atrae a turistas y amantes de la montaña, está cerca de la famosa estación de esquí de Courmayeur y de la entrada del túnel del Mont Blanc, un eje vital entre Francia e Italia. La zona afectada se sitúa a por lo menos cuatro kilómetros de la entrada del túnel, y todavía a más de Courmayeur, donde los turistas siguen paseando normalmente bajo el sol.
“La evacuación era necesaria e inevitable a causa del riesgo”, insistió este domingo el ayuntamiento de Courmayeur. La alerta había provocado incomprensión por parte de los habitantes y críticas de muchos profesionales del turismo, inquietos por las consecuencias para su actividad cuando apenas empieza a recuperarse de la epidemia de covid-19.
La amenaza del desmoronamiento de parte del glaciar “fue localizada y afectaba a una pequeña parte del territorio (de la comuna), en tanto en el resto de la misma zona, los valles y la municipalidad de Courmayeur, la actividad turística se desarrolló con normalidad absoluta”, subrayó la alcaldía, lamentando al mismo tiempo “el tono alarmista” de algunos medios de comunicación.
En septiembre y octubre de 2019, el glaciar Planpincieux ya se había había visto amenazado con un desprendimiento parcial de una porción de casi 250.000 m3. A partir de enonces se instauraron medidas de control en el lugar.