Estas viviendas en el distrito de Barú se encuentran ubicadas en las comunidades de La Victoria en el corregimiento Rodolfo Aguilar Delgado; y, Nuevo Amanecer y Agua Buena, ambas en el corregimiento de Puerto Armuelles.
Tres casas que fueron afectadas por el sismo registrado el viernes 4 de septiembre en horas del mediodía, en la provincia de Chiriquí, fueron evaluadas estructuralmente por el personal técnico del Ministerio de Vivienda y Ordenamiento Territorial (Miviot).
Estas viviendas en el distrito de Barú se encuentran ubicadas en las comunidades de La Victoria en el corregimiento Rodolfo Aguilar Delgado; y, Nuevo Amanecer y Agua Buena, ambas en el corregimiento de Puerto Armuelles.
El equipo de la Dirección de Coordinación Nacional de Proyectos y Asuntos Comunitarios del Miviot (Conapro) visitó en primera instancia la residencia del adulto mayor Jorge Espinosa, de 65 años, en la comunidad de La Victoria, quien vive junto a su esposa de 58 años y su hija de 19.
Según el informe de los técnicos, la casa, construida de bloques y techado de zinc con carriolas, resultó perjudicada parcialmente en el techo por la caída de una palma a un costado de la vivienda a raíz del evento sísmico, la cual luego de las evaluaciones técnicas el personal procedió a coordinar la ayuda en materiales para su reparación.
El segundo hogar evaluado está ubicado en la comunidad de Nuevo Amanecer, donde reside Adis Araúz, de 29 años, su esposo José Gómez, de 36 años y sus cuatro hijos menores de 2, 6, 10 y 12 años, cuya estructura de bloques resultó afectada en una de las paredes de los cuartos, dijo Davis Castro, jefe del departamento de Conapro en Chiriquí.
La que se llevó la peor parte fue una residencia en la comunidad de Agua Buena donde el evento telúrico afectó las paredes laterales, columnas, vigas, ventanas y piso de concreto. Emilio Flores, de 79 años, propietario de la casa, permanece encamado por mal de Parkinson y vive junto a su esposa Celina Lizondro, de 64 años; su hija Yohana Flores, de 31 años; su yerno Silverio Jordán, de 36 años y sus tres nietos de 9, 12, y 15 años.
En estos dos últimos casos, los técnicos del Miviot coordinan una pronta solución a las familias, ya que estas siguen ocupando las estructuras, pese al riesgo que representa de repetirse otro sismo o réplicas.
La directora regional de la entidad, Doris Atencio, señaló que dando seguimiento a los lineamientos del ministro Rogelio Paredes se brindarán las respuestas oportunas a las tres familias baruenses.
En Barú, el Miviot desarrolla el proyecto residencial Finca Zapatero donde se han construido 90 soluciones habitacionales a familias, cuyas viviendas han sido afectadas por sismos registrados en 2019 en Chiriquí, las cuales serán reubicadas y así garantizar la seguridad de estas personas que no cuentan con recursos económicos para construir un techo digno y seguro.