Esta nación posee las ventajas para posicionar el turismo de bodas, el que incentivará a los novios a decidirse por este sitio para consagrar su vida como pareja.
Trasladarse a otro país para contraer nupcias es poco común en Panamá, sin embargo, es muy frecuente en otras culturas en las que el turismo de bodas supone una industria más desarrollada desde hace varios años y que ha sumado muchos millones de dólares.
Según datos del Congreso Anual de Organizadores de Bodas de 2016, el turismo de bodas maneja anualmente, en todo el mundo, alrededor de 80 mil millones de dólares, suponiendo estadías de tres días en grupos de entre 40 y 500 invitados.
Para conocer acerca del tema, entrevistamos a Judy Amado, experta en planificación de bodas y asociada a Organizadores de Bodas Internacionales, quien comentó que, “querer hacerlo, marca el principal criterio para que este tipo de negocio turístico se pueda desarrollar en Panamá. ¿Qué le falta a Panamá? Solamente promover el destino, todo lo demás lo tiene”.
“El turismo de bodas -agregó- es aquel que nace de la intención, deseo o necesidad de contraer nupcias, de denominación religiosa, civil o simbólica, en cualquier ciudad, negocio o región en la que, naturalmente, no residen los contrayentes. Puede, también, la selección de ese destino de luna de miel, convertirse en el destino de la boda, para luego disfrutar de la ciudad elegida para vacacionar”.
Amado dijo que las bodas de destino no son excluyentes de matrimonios grandes, porque suelen ser más reducidas, no obstante, señaló que ha realizado bodas de destino que suman más de 300 personas, lo que hace presumir que no siempre se trata de un grupo pequeño de invitados, sino de un reto que se puede alcanzar.
¿Aplica Panamá para este tipo de destino turístico? “Sin dudas que aplica, pero no ha sido desarrollado como una oportunidad de negocio a nivel de país. De hecho, no ha desarrollado marca país en ningún rubro”, comentó la experta en organización de bodas.
Mencionó que nuestra nación nunca ha participado ni apostado a este tipo de turismo, pero manifestó que, a nivel privado, sí se han realizado bodas destino, y que en los últimos cuatro años algunos hoteles, como el American Trade, en el Casco Antiguo, y algunos de playa, han logrado promover este sector, el cual resulta “muy ventajoso como negocio”, y que “va creciendo con pasos pequeños”.
Señaló que, en Panamá ningún Gobierno, ni organizaciones de turismo, ni hoteles, han comprendido este tipo de turismo, porque no se ejecuta a través de los canales tradicionales del sector, sino mediante organizadores de bodas profesionales que son un canal que desconocen.
Una limitante que se puede presumir, es que existe la impresión que el trámite reglamentario para las parejas extranjeras que se quieren casar legalmente en Panamá, es muy complejo.
“El turismo de bodas se da desde muchos años. Pienso que se volvió popular hace 20 años, pero en una época, Panamá era el destino de los colombianos que no podían casarse después de un divorcio en Colombia”, recordó.
En cuanto a las ventajas que ofrecemos respecto a países vecinos como Costa Rica, Amado señaló que “aquel país tiene el turismo de bodas mucho más desarrollado, al igual que su Plan Maestro, su marca país y el turismo de todo tipo. A diferencia de Panamá, que sería mucho más competitivo a la conectividad, su moneda, el desarrollo de su ciudad y la oferta que permite su vida nocturna, playas y todo lo relacionado, ofrecer todo lo que este turismo requiere. De hecho, tiene hoteles en toda la ciudad listos para ofrecer servicios”.
El Casco Antiguo, la ciudad, las playas, El Valle de Antón, fueron mencionados por la experta en bodas como destinos por excelencia en Panamá.
A nivel de Latinoamérica, entre las plazas más populares y más desarrolladas para este tipo de turismo sobresalen México, con la Riviera Maya y San Miguel Allende; Hawaii, New York, el Caribe, Cartagena y Costa Rica. En Europa, Italia, Portugal, Barcelona, Madrid y París, aunque aclaró que se dan en todos los países.
Como parte de algunas recomendaciones para el desarrollo del turismo de bodas, la experta mencionó la importancia de participar en conferencias internacionales y entender lo que requiere este negocio. Necesario tener acceso y estar vinculado de alguna forma, con un experto en bodas local.
“Si eres hotel o similar, es importante participar en las ferias y convenciones referentes a bodas. Lo principal es que el país sea un destino conocido e interesante, porque la boda-destino nace del deseo de viajar a esa ciudad y aprovechar su celebración”, indicó.
El cliente de este tipo de turismo exige calidad y excelencia y, por tanto, el trato, la personalización, la creatividad, la excelencia en el servicio y que los profesionales ofrezcan garantía de éxito. Panamá posee estas ventajas que harán que los novios decidan este sitio para consagrar su vida como pareja. Solamente hace falta ampliar este mercado que presenta un gran potencial de crecimiento aquí.